Habrían hallado el cadáver desaparecido de una enfermera que murió a causa de coronavirus en Barranquilla

El cuerpo de Marilyn Pérez y el de otras tres víctimas del covid-19 fueron confundidos y entregados a otras familias

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Por los días de la muerte Pérez, su cuerpo y el de otras tres víctimas de coronavirus fueron confundidos y entregados a otras familias
Por los días de la muerte Pérez, su cuerpo y el de otras tres víctimas de coronavirus fueron confundidos y entregados a otras familias

El lunes 6 de julio del año 2020 falleció, en la Clínica del Prado, en Barranquilla, Marilyn Pérez Liñán, una enfermera que, en medio de sus labores profesionales, se contagio de coronavirus. La mujer estuvo luchando por su vida durante catorce días, sin embargo, las afectaciones cardiacas y respiratorias que le dejó el virus le quitaron la vida. El drama de la familia Hernández Pérez se extendió más de un año después de la muerte de la enfermera, pues, cuando decidieron recoger el cuerpo para darle santa sepultura, se encontraron con la desagradable noticia de que el cuerpo de Marilyn no aparecía. Hoy, luego de casi 16 meses desde el fallecimiento, se exhumó un cadáver que, al parecer, sería el de ella.

Tal y como lo reportaron medios de comunicación en horas recientes, el pasado 17 de noviembre, agentes del CTI de la Fiscalía, de la mano de peritos de Medicina Legal, llevaron a cabo una segunda exhumación correspondiente al proceso de búsqueda que se adelanta sobre el cuerpo de Pérez, en el cementerio Jardines de la Eternidad, en donde habría sido enterrada, por error, por parte de otra familia que también había perdido a un familiar por covid-19. “Nos da un poco de esperanza saber que ese sí puede ser el cuerpo de mi madre ya que tiene características específicas de ella, ahora lo que esperamos es que medicina legal no tome mucho tiempo para hacer las pruebas de ADN”, comentó, en testimonios recogidos por Blu Radio, Katherin Hernández, hija de Marilyn.

Los procesos de exhumación de los cuerpos se dieron luego de que la familia decidiera interponer un derecho de petición para solicitar a las autoridades competentes el inicio de la búsqueda del cuerpo desaparecido. Con aquel recurso legal aceptado, se llevó una primera exhumación el pasado 3 de marzo del año en curso, según explica el diario El Heraldo. Ese primer momento no lanzó resultados, pues, detalló ese mismo medio de comunicación no se encontraron rastros de Pérez en el lote 982, del jardín 38, del cementerio Jardines de la Eternidad. Por el contrario, ese día se encontró el cuerpo de un hombre que había desaparecido por aquellos mismos días en circunstancias similares a las de Marilyn, de hecho, se trataba de cuatro desapariciones en total.

Por los días de la muerte Pérez, su cuerpo y el de otras tres víctimas de coronavirus fueron confundidos y entregados a otras familias
Por los días de la muerte Pérez, su cuerpo y el de otras tres víctimas de coronavirus fueron confundidos y entregados a otras familias

Ante la fallida búsqueda, Katherine Hernández, de nuevo, solicitó una declaración de desacato a la Fiscalía 66 Seccional de Seguridad Pública, detalló el periódico, con lo que logró que se diera una segunda exhumación, que es de la que se está hablando actualmente, y de la que se espera entregue resultados positivos. Fue el 7 de julio, un día después de la muerte de Pérez, cuando, sobre las 10:00 a.m., comenta El Tiempo, la familia fue confirmada con la desaparición del cuerpo.

”El día que fuimos a recibir su cuerpo, la funeraria no tuvo respuesta por tres horas, el cuerpo no aparecía en la clínica y nadie nos daba razón de que había pasado, hasta que nos entró una llamada de la funeraria Los Olivos, la cual contratamos. Nos había dicho que mi mamá estaba sepultada en Jardines de la Eternidad y había sido entregada por error a otros familiares (...) hay cuatro fallecidos en la misma situación, solo que dos de ellos están extraviados, serían el de mi mamá y de otro seño”, relató su hija, en una chara con ese portal informativo que, además, detalló que Marilyn tenía 50 años de edad para el día de su muerte, y padecía de diabetes. Ya en el hospital, contagiada con el virus, presentó una neumonía severa.

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