Exsenador Merlano rendirá indagatoria ante la Corte Suprema por el caso “usted no sabe quién soy yo”

El destituido parlamentario sucreño utilizó su investidura sobre miembros de la Policía Metropolitana de Barranquilla para zafarse de un control vehicular. El hecho le costó su puesto a él y al entonces comandante de esa fuerza

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Exsenador Eduardo Merlano, destituido de su escaño en 2012 tras protagonizar episodio de "usted no sabe quién soy yo". / Colprensa
Exsenador Eduardo Merlano, destituido de su escaño en 2012 tras protagonizar episodio de "usted no sabe quién soy yo". / Colprensa

La Corte Suprema de Justicia confirmó, este miércoles 17 de noviembre por medo de sus redes sociales, el llamado a indagatoria para el exsenador del Partido de La U Eduardo Merlano, quien protagonizó un bochornoso escándalo el 13 mayo de 2012, cuando fue detenido por la Policía por conducir en estado de embriaguez.

Según informó el alto tribunal, la “Sala de Instrucción abre investigación contra el exsenador Eduardo Merlano por tráfico de influencias de servidor público. Lo llama a indagatoria por usar condición de congresista para que no inmovilizaran su carro pese a no llevar la licencia y negarse a prueba de alcoholemia”.

Valga señalar, entonces, que el llamado de la Corte se da nueve años después, no sólo desde que se presentara el incidente, sino también desde que el mismo fuera destituido de su cargo en el Senado de la República por orden de la Procuraduría General de la Nación. Esto último se confirmó el 16 de octubre de 2012.

Es que, el episodio quedó grabado en el imaginario de los colombianos y todavía se puede encontrar en distintas redes sociales. Merlano, que se encontraba en Barranquilla, es franco con los 11 agentes de tránsito que tratan de inmovilizar su vehículo, una camioneta de alta gama, al decirles:

“Usted no sabe quién soy yo... ¿Cómo le van a hacer una prueba de alcoholemia a un Senador de la República? 50.000 personas votaron por mí ¿y ustedes me van a faltar al respeto?”.

Cuando esto no funciona, Merlano decide llamar al centro de control de la Policía Metropolitana de Barranquilla, desde donde solicita que le comuniquen con el comandante de ese brazo de de la institución, general Óscar Pérez Cárdenas, para que este le ayude a controlar la situación.

Si bien Pérez no pasó al teléfono en ese momento, las llamadas del excongresista sucreño sirvieron para evadir el problema y continuar con su camino, mientras que una versión del hecho llegó a oídos del uniformado que, a su turno, procede a llamarles la atención a los agentes y decirles que la prueba de alcoholemia no era necesaria. Llegó, incluso a sancionar a tres de ellos.

Sin embargo, Pérez, hoy retirado, anunció su renuncia a la institución siete días después de que se presentara el episodio. Con ese anuncio, señaló que, “realicé un llamado de atención injusto y descontextualizado a los policías, pues al principio se me informó de un supuesto maltrato al Senador”.

El hecho contó con varios agravantes, como que el político sincelejano amenazara con levantar un proceso judicial en contra de la Policía Nacional por permitir la circulación del video en el que se le ve usando su posición para tratar de zafarse de las normas que, tanto por ser ciudadano colombiano, como por ser congresista, se supone debe hacer respetar.

Toda la situación desató una tormenta mediática que se resolvió cuando la Procuraduría decidió avanzar con el proceso disciplinario en contra del entonces senador, quien terminó pidiendo perdón al país por sus actos durante la audiencia del 12 de julio de 2012.

“Pido igualmente perdón a toda nuestra Policía Nacional y reivindico su abnegación y su servicio. Perdón que va dirigido especialmente al señor general Oscar Pérez que solicitó su retiro y a los servidores de la institución que realizaron el operativo”, dijo en ese momento.

Eso, sin embargo, no fue suficiente para mantener su investidura. En un documento publicado el 16 de octubre de ese mismo año, el Ministerio Público informó que, “sancionó con destitución e inhabilidad general para ocupar cargos públicos por 10 años al senador de la República Eduardo Carlos Merlano Morales, por haber influido en miembros de la Policía Metropolitana de Barranquilla, Atlántico, que efectuaron un procedimiento policivo en un puesto de alcoholemia, como en funcionarios que laboraban en el Centro Automático de Despacho, valiéndose de la investidura de senador de la República”. Esto, consideró la entidad, se configuraba como una falta gravísima.

Así se llega a la decisión de la Corte Suprema, que no ha explicado las razones para abrir el proceso en este momento, ni mucho menos las fechas en las que se llevará a cabo el mismo.

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