Un campesino de 37 años de edad y su hijo de 11 fueron encontrados muertos a tiros al interior de su vivienda, en el municipio de Ituango, en Antioquia. Las autoridades señalaron a los sucesores del paramilitarismo, Clan del Golfo, como autores del crimen.
De acuerdo con la información conocida, un grupo de hombres armados hostigaron a la población del corregimiento en un caserío entregado a un grupo de víctimas de la violencia, según RCN Radio. En medio de ese operativo violento, ingresaron a una finca, donde se encontraban las dos personas asesinadas.
“Hombres armados incursionaron durante la madrugada a esa zona de Ituango, en su lucha por el control territorial con las disidencias de las Farc, e intimidaron a los pobladores. Ingresaron a una vivienda y allí dentro asesinaron a disparos a un campesino y su hijo de 11 años”, afirmó el alcalde del municipio Mauricio Mira.
El mandatario aseguró que, al parecer, los paramilitares atacaron al campesino, quien fue identificado como Rafael Antonio García. Su hijo, al ver la situación, trató de defenderlo, pero resultó víctima también del ataque de los violentos. El menor fue identificado como Juan Sebastián.
Después de conocerse los hechos, que habrían ocurrido durante este 13 de noviembre, las autoridades adelantaron un consejo de seguridad para iniciar las investigaciones y tomar medidas para garantizar la seguridad.
Sin embargo, el alcalde señaló directamente al Clan del Golfo como los autores del homicidio. “El grupo paramilitar del Clan del Golfo asesinó a un niño y a un señor adulto en el corregimiento de La Granja”, aseguró Mira, de acuerdo con el diario El Espectador.
Las autoridades, así mismo, sostienen que el homicidio se generó en medio del control territorial que busca ejercer el Clan del Golfo en la zona, en disputas con grupos disidentes de las Farc que han incursionado en el territorio. El crimen se habría cometido en una finca entregada a víctimas de la violencia en el Nudo del Paramillo.
Durante todo el año, el municipio de Ituango, en Antioquia, ha sufrido un aumento de la violencia. A finales del mes de julio, los pobladores del corregimiento de La Granja abandonaron sus casas casi por completo, luego de llamadas anónimas amenazantes a los líderes de la comunidad.
Así mismo, en el Golfo de Urabá y el norte de Antioquia se han presentado fuertes enfrentamientos entre el Ejército y el Clan del Golfo. La operación Agamenón permitió el pasado 23 de octubre la captura de alias Otoniel, máximo cabecilla de ese grupo armado, pero desembocó una arremetida violenta por la reorganización del grupo.
El pasado 7 de noviembre, un capitán, un cabo y dos soldados profesionales fueron asesinados cuando realizaban labores de seguridad para la comunidad, según confirmó el brigadier general Juvenal Díaz Mateus, comandante de la Séptima División del Ejército. El ataque habría sido perpetrado por hombres armados del Clan del Golfo.
La emboscada se produjo en la vereda Santa Lucía, del municipio de Ituango, en Antioquia. Donde los militares fueron atacados con explosivos y disparos de fusil, desde las ventanas de las casas en las que se encontraban atrincherados los paramilitares.
Por ese crimen, el Ejército ofreció hasta 120 millones de pesos por información que conduzca a la captura o neutralización de alias ‘Alberto’, que sería el cabecilla de la organización armada y narcotraficante en el municipio de Ituango. A ese delincuente también le fue atribuido el doble homicidio de los campesinos, padre e hijo.
De acuerdo con una alerta temprana de enero de 2020 de la Defensoría del Pueblo, el Clan del Golfo o autodenominadas Autodefensas Gaitanistas de Colombia, controlan un corredor desde el municipio de Tarazá, en la subregión del Bajo Cauca hasta el municipio de Peque en el occidente de Antioquia. Por el otro lado, el Frente 18 buscaba fortalecer su presencia en el Nudo de Paramillo, en el sur de Córdoba y hacia el corregimiento de Santa Rita en Ituango, un sector apetecido por las rutas del narcotráfico hacia América Central.
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