Actual comandante de la Policía de Bogotá fue mencionado en la investigación sobre el homicidio del grafitero Diego Felipe Becerra

Las recientes condenas a oficiales y funcionarios de la Policía de Bogotá dentro del caso del homicidio del grafitero Diego Felipe Becerra siguen confirmando lo que familia del joven artista ha sostenido desde que inició el proceso penal por este crimen: por parte de los uniformados se coordinó un montaje para ocultar lo ocurrido con el menor a manos del patrullero Wilmer Alarcón.

Y dentro de ese andamiaje, con el que se pretendía hacer parecer al grafitero como un atracador de un bus de servicio público, no solo participaron mandos medios de la institución, también estuvieron implicados policías de alto rango como fue el caso del coronel Nelson de Jesús Arévalo, condenado que entonces era el comandante en la localidad de Suba, donde ocurrió el homicidio de Becerra.

Además, dentro de lo que ha arrojado la investigación, también resultó implicado el general Francisco Patiño, que para esa época se desempeñaba como comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá a quien se señala de ordenar la manipulación de la escena del crimen y evitar así una mala imagen para la Policía, ya que por esos días se llevaba a cabo el Mundial del Fútbol Sub-20 en la capital colombiana.

Precisamente, dentro de la acusación que se le hizo el viernes al oficial se volvieron a mencionar los hechos en los que se buscó hacer parecer a Becerra como un delincuente que en su huida terminó muerto y en ese episodio salió a relucir el nombre del actual comandante de la Policía Metropolitana de Bogotá, el hoy general Eliecer Camacho.

En la emisora La W Radio citaron el aparte del documento en el que se menciona al alto oficial, que para 2011 lideraba la Seccional de Investigación Criminal (Sijín) de Bogotá y a quien, según la investigación, el general Patiño le encargó recibir la denuncia del conductor del vehículo de servicio con quien se pretendía hacer el montaje de que Becerra era un atracador.

“El teniente coronel Nelson de Jesús y el teniente coronel Eliécer Camacho, comandante de la Sijín MeBog cumplieron las tareas necesarias que consistieron en ubicar, contactar y entrevistar al señor Jorge Eliécer Narváez, un conductor de una buseta de servicio público quien el día 22 de agosto de ese año, siendo aproximadamente las 5 p.m., en el CAI del barrio 20 de julio, y en su presencia señor general instauró una denuncia penal en donde narró hechos contrarios a la verdad que enteramente beneficiaban la tesis de la defensa del patrullero Wilmer Antonio Alarcón, a la imagen de la Policía Metropolitana de Bogotá, obviamente a su comandante y avalaba la adulteración de la escena en la que participaron altos oficiales”, destacaron del expediente en el medio radial.

Sin embargo, no se especificó si el oficial estaba al tanto de lo que se pretendía hacer con lo que se demostró más adelante era una falsa denuncia por parte del conductor de la buseta.

En la emisora RCN Radio consultaron con el comandante de la Policía de Bogotá, quien negó de tajo cualquier vinculación con ese señalado montaje de las autoridades y aseguró que esa investigación no la asumió la Sijín, sino el Cuerpo Técnico de Investigación (CTI) de la Fiscalía General de la Nación.

Aseguró en el medio radial que ni estuvo en el sitio de los hechos, y que tampoco recibió llamadas para que verificara lo ocurrido.

“Estamos prestos a responder a los requerimientos que dado el caso tenga la fiscalía sobre este hecho y que dado el caso tome las medidas necesarias”, sostuvo en RCN Radio.

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