Estado tendrá que indemnizar a un campesino que perdió su mano durante el paro cafetero en Quindío

El fallo del Tribunal Administrativo del Quindío declaró como responsables a la Nación, el Ministerio de Defensa y a la Policía Nacional, por la lesión que le dejó a Pedro Suárez una pérdida de la capacidad laboral del 44,35 %

Guardar
Imagen de referencia. A Pedro Humberto Suárez Sotelo el Estado tendrá que pagarle cerca de $124 millones de pesos. Foto: REUTERS/José Miguel Gómez. Foto de archivo
Imagen de referencia. A Pedro Humberto Suárez Sotelo el Estado tendrá que pagarle cerca de $124 millones de pesos. Foto: REUTERS/José Miguel Gómez. Foto de archivo

El Tribunal Administrativo del Quindío (TAQ) ordenó al Estado a indemnizar a Pedro Humberto Suárez Sotelo, un campesino que perdió una de sus manos durante el paro cafetero del 2013 en Calarcá, Quindío.

El fallo de segunda instancia en contra del Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad), la Policía Nacional y el Ministerio de Defensa obliga al Estado a entregarle a Suárez y a su familia una suma cercana a los $124 millones de pesos por reparación de daños.

“Revóquese la sentencia proferida el 15 de marzo de 2021 por el juzgado sexto administrativo de Armenia, Quindío y declaró patrimonialmente responsable a la Nación, Ministerio de Defensa, Policía Nacional, por las lesiones sufridas por Pedro Humberto Suárez Sotelo como consecuencia de los hechos ocurridos el 25 de febrero de 2013″, se lee en el documento del fallo, conocido por RCN Radio

Por lo anterior, el Tribunal indicó que “se condena a la Nación – Ministerio de Defensa - Policía Nacional a pagar al demandante, Pero Humberto Suárez Sotelo la indemnización debida y futura por concepto de lucro cesante, por un valor total de ciento veinticuatro millones doscientos mil ochocientos setenta y tres pesos.”

Los hechos

Según conoció el diario regional La Crónica del Quindío, los hechos en los que resultó afectado Suárez Sotelo ocurrieron el pasado 25 de febrero de 2019, en cercanías a la glorieta de Versalles de Calarcá, donde se reportó una manifestación pública de los campesinos que participaban en el denominado Paro Nacional Cafetero, en el que le pedían al Gobierno Nacional que mejorara los precios del café y que también les brindara apoyo en la refinanciación de deudas agropecuarias.

Allí, durante el desarrollo de la manifestación la Policía Nacional hizo presencia con el Escuadrón Móvil Antidisturbios (Esmad) con el fin de controlar los disturbios que pudieran presentarse y de dar paso en la vía La Línea, la cual había sido obstaculizada por los protestantes.

El afectado, quien, según su versión no se encontraba manifestándose de forma violenta, y que de hecho se resguardaba en unos cafetales cercanos a la vía debido a la revuelta que se presentaba entre la fuerza pública y los ciudadanos, fue impactado por una de las granadas que lanzó la Policía en contra de la multitud, así lo conoció La Crónica del Quindío.

De acuerdo con el mismo medio, debido a la gravedad de sus heridas, Suárez Sotelo fue trasladado por miembros de la Policía al Hospital La Misericordia de Calarcá. Allí, el personal médico estableció que el campesino había perdido dos dedos de su mano derecha a causa de la explosión y, ante la seriedad de la lesión, tuvo que ser remitido al Hospital San Juan de Dios de Armenia, en donde los galenos tuvieron que amputarle toda la extremidad afectada.

Tras los hechos, el diario regional conoció que el hombre demandó al Estado alegando que la pérdida de su mano derecha se debió al uso desproporcionado de la fuerza por parte del Esmad y la Policía Nacional, lo que le causó una pérdida de la capacidad laboral del 44,35 %, según un certificado expedido por la Junta Regional de Calificación de Invalidez del Eje Cafetero.

Aunque el Estado intentó defenderse de las pretensiones de la demanda señalando que no era cierto que “la Policía hubiese realizado un uso desproporcionado de la fuerza, como se observa en videos; como tampoco lo es, que las lesiones que se aducen en este medio de control puedan ser atribuibles a la Policía Nacional”, el Tribunal Administrativo del Quindío determinó que, aunque no hay prueba de que las lesiones contra Suárez Sotelo fueran ocasionadas por la fuerza pública, tampoco hay evidencia que la Policía no tuviera responsabilidad en el caso.

“No hay evidencia de que la lesión padecida por Suárez Sotelo fuera consecuencia del uso arbitrario de la fuerza en su contra por parte de los miembros del escuadrón antidisturbios; pero tampoco, hay prueba de la configuración de una causal de exoneración de su responsabilidad o la falta de nexo causal entre el daño y su actuar o que se produjo un evento de concurrencia de acciones u omisiones”, indicó el Tribunal, según conoció La Crónica del Quindío.

Por ello, el Estado tendrá la obligación de indemnizar al campesino con la millonaria suma y, además, de acuerdo con RCN Radio, tendrá que pagar salarios mínimos mensuales legales vigentes a 21 integrantes de la familia de Suárez Sotelo por perjuicios morales y daños a la salud.

SEGUIR LEYENDO

Guardar