Un certero golpe dio el Estado colombiano a las grupos armados ilegales en el país. Este sábado 25 de octubre, el máximo cabecilla del Clan del Golfo, Dairo Antonio Úsuga David, alias ‘Otoniel’, fue capturado por unidades de la Policía, el Ejército y la Fuerza Aérea, durante la llamada Operación ‘Osiris’ en el Urabá antioqueño.
Este es, sin duda, uno de los golpes más contundentes de la Fuerza Pública, por ejemplo, tras la baja de Guillermo León Sáenz Vargas, alias ‘Alfonso Cano’, que se desempeñó como jefe máximo del secretariado de las Farc. Este, recordemos, fue abatido el 4 de noviembre de 2011 durante un bombardeo en Morales, Cauca, en el marco de la Operación ‘Odiseo’.
Tras la captura de Úsuga David, el presidente, Iván Duque, manifestó que este hecho, sin duda, es uno de los más trascendentales de las últimas décadas. “Este es el golpe más duro que se le ha propiciado al narcotráfico en este siglo en nuestro país y este golpe solamente es comparable con la caída de Pablo Escobar en los años 90. Alias Otoniel era el narcotraficante más temido en todo el mundo, asesino de policías, de soldados y de líderes sociales”.
Sobre los detalles de cómo se dio esta captura, el mayor general Luis Fernando Navarro, jefe de las Fuerzas Militares de Colombia, explicó que la Operación Osiris finalizó este sábado luego de que hace siete años iniciaran los operativos para dar con Otoniel.
OTROS JEFES CAÍDOS DEL ‘CLAN’:
‘Gavilán’:
Sin embargo, junto a ‘Otoniel’, han sido otros los operativos que han desencadenado en la baja de líderes del Clan del Golfo, y los cuales se han llevado a cabo en los últimos años. Uno de los antecedentes es el de Roberto Vargas Gutiérrez, alias ‘Gavilán’, quien, en septiembre de 2017, fue ultimado por las uniformados de la Policía y el Ejército Nacional en las selvas del nororiente de Antioquia.
En su momento, ‘Gavilán’ era el segundo hombre al mando de dicha estructura criminal, y las autoridades llegaron a ofrecer 500 millones de pesos. El golpe se produjo con la participación de más de 100 unidades de la fuerza pública y, a través de las labores de inteligencia, se dio con su paradero gracias a la señal satelital que emitió su televisor para ver el partido entre Colombia y Venezuela, en el marco de las eliminatorias al Mundial de Rusia 2018.
‘El Indio’:
Otro ejemplo respecta a Manuel Arístides Meza, mejor conocido como ‘el Indio’, y quien por ese entonces era el tercer cabecilla del Clan del Golfo. Su neutralización se produjo en zona rural del corregimiento de Tierradentro, en Montelibano, departamento de Córdoba. Dentro de sus funciones se encontraban operar las estructuras criminales en la costa Caribe y Pacífica y, además, articular el narcotráfico del grupo armado hacia Centroamérica y Europa.
El ‘Indio’ era el responsable de casos de terrorismo, explotación sexual, múltiples homicidios en contra de líderes sociales y hasta de obstrucción de vías públicas alrededor del territorio nacional. Además, cuando un francotirador acabó con su vida, era solicitado en extradición por el Gobierno de los Estados Unidos, con registro de notificación Azul de la Interpol.
‘Marihuano’:
El tercer caso, y el más reciente, corresponde a la baja de Nelson Darío Hurtado, alias ‘Marihuano’, a principios de febrero pasado en Riosucio, Chocó. Este hombre, con un prontuario de 26 años en hechos delictivos, era la mano derecha de alias ‘Otoniel’.
Conocido con su otro alias, ‘El Cabo’, lideró el brazo armado del Frente Juan de Dios Úsuga David, al punto en que las autoridades le adjudican un extenso historial de explotación sexual, así como asesinatos de jóvenes y líderes sociales en el país. Así mismo se le imputan cargos de narcotráfico: bajo su liderazgo, el Clan del Golfo escaló en el negocio de la exportación de sustancias ilícitas en la región, alcanzando el segundo lugar en cuanto a volumen.
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