Se disfrazaban de policías para robar viviendas en Bogotá

Los capturados serán judicializados por los delitos de hurto calificado y agravado, utilización ilegal de insignias y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de uso privativo de las Fuerzas Armadas

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Foto: Prensa Fiscalía General de
Foto: Prensa Fiscalía General de la Nación

Según la información suministrada por la Fiscalía General de la Nación, los tres hombres fueron capturados en operativos efectuados por la Policía de Bogotá, presuntamente por ingresar a las viviendas vestidos como policías, se ganaban la confianza de sus víctimas y no levantaban sospechas al hurtar en sus viviendas.

El ente investigador señaló que la Policía capturó a Diego Alexander Castillo Extremos, Samuel Rodríguez Díaz y Jeison Acevedo en flagrancia, cuando salían, al parecer, de realizar un hurto en una vivienda en el barrio Prado Veraniego de la localidad de Suba. En su poder se les encontró tres armas de fuego, un supresor de sonido, un inhibidor de señal y tres chaquetas color verde fluorescente con logos de la Policía Nacional.

En audiencias preliminares se formuló la imputación por los delitos de hurto calificado y agravado, utilización ilegal de insignias y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de uso privativo de las Fuerzas Armadas. Dichos cargos no fueron aceptados por los procesados.

Un juez con función de control de garantías de Bogotá les impuso medida de aseguramiento en centro carcelario.

Otro golpe a la delincuencia en Bogotá

Este miércoles, la Policía de Bogotá también informó de la desarticulación de la banda de alias Los Camilo. “Esta es una de las tres bandas de narcotráfico más grandes de Bogotá. Tenía sus tentáculos desde Soacha, Bosa, Kennedy y Tunjuelito. Hoy sus habitantes pueden dormir más tranquilos”, indicó la alcaldesa mayor de Bogotá, Claudia López, quien explicó que las rentas criminales de la banda podían superar los 2.100 millones de pesos mensuales.

La organización delincuencial era integrada por 18 personas que están siendo procesadas por su presunta responsabilidad en los delitos de homicidio agravado; concierto para delinquir; fabricación o porte de estupefacientes; y fabricación, tráfico, porte o tenencia de armas de fuego.

Foto. Alcaldía de Bogotá
Foto. Alcaldía de Bogotá

“Para que la gente comprenda la magnitud de esta operación, el haber logrado la captura y desarticulación completa de la banda de alias ‘Camilo’, representa para la seguridad de Bogotá, lo que representó en su momento, a nivel nacional, la captura de un cabecilla del secretariado de las FARC”, comparó la alcaldesa, Claudia López.

Esta organización, según la investigación, tenía azotadas a las localidades de Bosa, Kennedy y Tunjuelito en Bogotá, y a los municipios de Soacha en Cundinamarca y Flandes en el Tolima. “Hoy sus habitantes, pueden dormir un poco más tranquilos”, subrayó la mandataria.

A su turno el coronel Jairo Baquero, comandante operativo de la Policía Metropolitana de Bogotá, explicó que, “solo en Bogotá su incidencia era en 38 barrios de estas tres localidades en las que viven cerca de 1′938.000 habitantes”.

El oficial destacó que, “el mérito también es para los agentes encubiertos que durante varios meses estuvieron infiltrados en esta organización y pudieron recaudar los elementos materiales probatorios para que fueran presentados ante la justicia”.

Este golpe se registró luego de una investigación que duró siete meses, en la que se interceptaron llamadas telefónicas y se le hizo seguimiento a los delincuentes que quedaron grabados en videos que se constituyeron en material probatorio para su judicialización. Estas personas también utilizaban uniformes de uso privativo de la Policía Nacional, e igualmente de empresas de servicios públicos.

Este trabajo se realizó de manera articulada entre los miembros de la SIJÍN de la MEBOG y la Delegada para la Seguridad Ciudadana de la Fiscalía General de la Nación. La investigación señala que el líder de esta organización era conocido con el alias de Camilo, El Viejo, El Cucho o la Firma y tendría más de 17 años de vida delictiva.

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