Tras conocerse el deceso de este hombre, las directivas del Hospital San Vicente aclararon a la opinión pública, que la persona fallecida a las afueras del centro de atención sí tuvo atención médica días previos a su muerte; sin embargo, en las últimas horas él se había negado a seguir recibiendo atención y había solicitado su salida.
Según la información emitida por el medio local Telemedellín, este paciente había ingresado al hospital desde hace dos días por causas que no han sido reveladas, y por decisión propia decidió abandonar el lugar y renunciar al servicio. De hecho, tras verlo deambular a las afueras del hospital, nuevamente personal médico le ofreció la atención, pero el hombre se volvió a negar a ingresar al centro de salud.
Algunos transeúntes que fueron testigos del momento en el que este paciente se desplomó en cercanía al hospital, pensaron que la muerte del hombre se debía a la falta de atención, pero dicha situación ya fue aclarada por parte de las directivas de la institución.
María Clara Mendoza Arango, quien es jefe de urgencias del San Vicente, a través de un video emitió la aclaración de los sucedido:
“Dicho paciente solicitó egreso voluntario firmando disentimiento de la atención en las horas de la mañana, luego de retirarse de la Institución y estando en el espacio público se le ofrece ser atendido nuevamente y el paciente rechaza la atención hospitalaria y luego fallece en las horas de la tarde”, explicó la galena.
En otras noticias acerca de las entidades de salud de Medellín, en las últimas horas, el sindicato de Profesionales y Trabajadores del Hospital General de Medellín, Sinprogen, expresó su preocupación tras conocer el informe de la Superintendencia Nacional de Salud, en el cual se reportó el hallazgo de 55 anomalías de tipo financiero, administrativo y asistencial de la institución de salud.
Tras dicho reporte del estado de la entidad de salud, el sindicato también evidenciaron una serie de consideraciones las cuales ponen en riesgo el futuro del hospital.
“La planta directiva del hospital carece de experiencia y conocimiento para el ejercicio del cargo recomendado”; además, señala que varios funcionarios de carrera han sido relegados por personal contratado por prestación de servicios; y advierte que el clima laboral ha decaído y que el gerente ha cerrado los canales de comunicación con las organizaciones sindicales.
Además, exponen que hay “desatención a las unidades críticas urgencias”, donde las ambulancias en turno son obligadas a esperar hasta cinco horas hasta que a los pacientes remitidos se les asignen camillas, y demoras en la atención a pacientes ya evaluados por médicos generales.
Ante el panorama, el sindicato de Profesionales y Trabajadores del Hospital General de Medellín se declaró preocupado por la situación y calificó de errática la administración del gerente Mario Fernando Córdoba Pérez.
De acuerdo con el informe del superintendente Nacional de Salud, Fabio Aristizábal Ángel, presentado el pasado viernes 15 de octubre, este señaló que luego de una visita al Hospital se encontraron con serias deficiencias administrativas como por ejemplo que se debieron destinar $25.000 millones para mantenimiento de equipos, tema que no se realizó, pues solo se asignó $15.000 millones a estas labores, de los cuales solo se ejecutaron $11.000 millones.
Además, también se encontró una flexibilización en contratos, en la que mencionan que algunos de los contratistas del hospital no pagan la seguridad social y que hay saturación en urgencias y cuidados intensivos.
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