A través de redes sociales, dos jóvenes denunciaron que fueron discriminadas por un hombre que les decía que estaban haciendo exhibicionismo por estar abrazadas en uno de las zonas del sistema de transporte público. Los hechos, según contaron las mujeres, ocurrieron en la estación Envigado el pasado domingo en horas de la tarde, Melisa Salazar estaba abrazada con su novia, de repente empezaron a escuchar que un hombre hablaba por teléfono en voz alta y solicitaba apoyo para sacar a dos personas que estaban siendo irrespetuosas.
Según describieron las jóvenes, el hombre les dijo que las iba a hacer bajar en la próxima estación y que debían entender que no podían comportarse de esa manera ya que había niños en la zona, al sentirse discriminadas y ver que estaban viviendo un caso de homofobia, decidieron llamar a la Policía.
“Hoy mi novia y yo esperábamos en la plataforma del Metro de Medellín, yo recostada en un muro, ella recostada en mí. Con mi brazo rodeaba su cintura y conversábamos. De pronto me empezó a hacer mucho ruido la voz de un hombre que decía: Las hago bajar en la próxima estación. “Sí, por exhibicionismo, acá hay niños”, una descripción muy imprecisa de nuestro gesto. Se iba acercando hasta que nos abordó. Antes de empezar con el sermón de «No soy homofóbico pero…», se identificó como Sargento, y nos advirtió que en la próxima estación nos iban a bajar...”, contó la mujer en redes sociales.
Según las víctimas, el hombre les aseguró que era sargento y que tenía la potestad de bajarlas del sistema cuando él quisiera, además, de que ya había llamado refuerzos para que las bajaran del sistema. Cuando las mujeres se sintieron agredidas empezaron a grabar la situación y luego la compartieron en redes sociales.
Minutos después, llega una agente de Policía al lugar para verificar la situación y atender la denuncia, “no pudimos saber su nombre, no quiso identificarse de nuevo. Al instante que, junto a otra chica y la policía, le contrariamos y lo cuestionamos, no tuvo mejor idea que huir, de pronto se sintió muy observado, o más exhibicionista que nosotras, y para su suerte llegó el metro”, aseguró la joven.
Debido a que el hombre huyó del lugar y no respondió por los cuestionamientos que le estaban haciendo las mujeres junto a la Policía, las víctimas no pudieron poner una denuncia penal pero sí solicitaron de manera pública que el Metro de Medellín haga algo al respecto, según las mujeres, con esta, es la segunda vez en una sola semana que se vive una situación de homofobia dentro de las instalaciones del sistema de transporte.
Por su parte, el Metro, respondió que rechazan cualquier acto de discriminación dentro de sus instalaciones y que están trabajando en políticas públicas para que no se vuelvan a presentar casos por el estilo.
“Rechazamos cualquier tipo de discriminación. Somos un medio de transporte incluyente, donde todos tienen cabida, y no compartimos las muestras de intolerancia y discriminación por orientación sexual, creencias, discapacidad, lengua u otra condición”, aseguró la empresa a través de un comunicado.
Por ahora, aseguraron que la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá estás desplegando sus servicios para atender a las jóvenes afectadas y brindarles acompañamiento.
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