El colombiano David Díaz, químico de la Universidad Nacional, trabaja en el equipo de uno de los ganadores del Nobel

Díaz apareció en algunas de las fotografías con la camiseta de la selección colombiana de fútbol. David trabaja de la mano de Benjamin List, quien se convirtió en su tutor

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David aparece a la izquierda
David aparece a la izquierda de la fotografía, y porta la camiseta del país

El alemán Benjamin List y el escocés David MacMillan fueron condecorados con el prestigioso reconocimiento del premio Nobel, aquel que honra a quienes han llevado a cabo investigaciones, descubrimientos o contribuciones que se consideran como notables para la humanidad. El desarrollo de la organocatálisis asimétrica les entregó el premio y, ahora, con la lupa de los medios de comunicación sobre ellos, se resalta la labor del colombiano David Díaz, quien ha trabajado de cerca con List.

El diario El Espectador, uno de los medios encargados de resaltar la historia de David, habló con el egresado de la Universidad Nacional de Colombia, nacido en Fusagasugá, quien les relató los detalles del momento en el que recibió la emocionante noticia. La herramienta por la que su tutor y MacMillan ganaron el Nobel de Química hace que el trabajo en esta disciplina llegue a ser más ecológico.

“Construir moléculas es un arte difícil. Benjamin List y David MacMillan son galardonados con el Premio Nobel de Química 2021 por su desarrollo de una nueva herramienta precisa para la construcción molecular: la organocatálisis. Esto ha tenido un gran impacto en la investigación farmacéutica y ha hecho que la química sea más ecológica (...) Benjamin List y David MacMillan son galardonados con el Premio Nobel de Química 2021 porque en 2000 ellos, independientes el uno del otro, desarrollaron un tercer tipo de catálisis. Se llama organocatálisis asimétrica y se basa en pequeñas moléculas orgánicas”, se lee en la página web de los Nobel.

El escocés David MacMillan. REUTERS/Eduardo
El escocés David MacMillan. REUTERS/Eduardo Muñoz

En 2017, según le comentó a ese medio de comunicación, llegó a Mülheim, una pequeña ciudad ubicada en el noroeste de Alemania, específicamente, al Max-Planck-Institut für Kohlenforschung, instituto en el que trabaja el colombiano y a donde llegó hace unos cuatro años para hacer su doctorado. Allí conoció a List, quien se convirtió en su tutor.

El 6 de octubre, día en el que se dio a conocer la noticia, David se encontraba en aquel lugar y, hacia el medio día, decidió ver la transmisión de los Nobel, como era costumbre para él, para ver quien sería en ganador. Según lo que pensó para aquel momento, era más que obvio que el Nobel estaría dirigido a aquellas personas que llevan meses trabajando en la vacuna del coronavirus, por lo que el proyecto del que participa no parecía, según él, tener la más mínima posibilidad de alcanzar la especial mención. La sorpresa que se llevó cuando dijeron el nombre de su tutor y el de su colega, MacMillan, fue inmensa, tanto así, que lo primero que pensó fue que se trataba de una broma.

German scientist Benjamin List, who
German scientist Benjamin List, who shares the 2021 Nobel Prize in Chemistry together with David MacMillan for the development of asymmetric organocatalysis, celebrates with well-wishers at the Max-Planck-Institute for Coal Research in Muelheim an der Ruhr, Germany, October 6, 2021. REUTERS/Wolfgang Rattay

“El anuncio del Nobel siempre lo hacen primero en sueco. Yo, claro, no entiendo ni papa de sueco. Así que cuando pronunciaron una palabra parecida al nombre de mi jefe, no me sorprendí. Paré todo lo que estaba haciendo y miré el computador. Después repitieron el fragmento en inglés y no lo podía creer: habían dicho Benjamin List. Los gritos estallaron en todas las oficinas”, le relató el químico a El Espectador.

David relató que una de las sorpresas más grandes respecto a la victoria de List es su edad, pues, a sus 53 años, se considera como una persona joven para recibir este prestigioso premio. “Por lo general, se lo dan a personas mayores, no a cincuentones. Así que, para saber si era mamadera de gallo, decidimos llamarlo porque justo ese día estaba en Ámsterdam, con su esposa”, recordó el colombiano que, además, le contó al diario que, en efecto, el hombre le confirmó que la noticia era cierta.

Lo que siguió luego del anuncio fue la realización de una fiesta que, además de ser planeada en tiempo récord, requirió la compra de 130 botellas de champaña. Benjamin llegó al instituto luego de una hora y media, y fue recibido por 300 personas, entre colegas y periodistas. List, en su amabilidad, destacó David, adelantó una rueda de prensa en la que resolvió las dudas de los curiosos respecto a su logro profesional.

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