Por presuntas irregularidades en el control y vigilancia de la construcción del clínica La Ermita de Cartagena, la Procuraduría General de la Nación profirió pliego de cargos contra los exalcaldes locales, Mauricio Guillermo Betancourt y Javier Enrique Jaramillo.
La Procuraduría Provincial de Cartagena señaló que, al parecer, los exmandatarios de la Localidad Histórica y del Caribe Norte de la ciudad no realizaron las acciones pertinentes de control, debido a que, supuestamente, las obras ejecutadas no corresponderían a los planos presentados y aprobados en la licencia de construcción de este importante proyecto.
Por tal razón, el Ministerio público también dictó cargos contra la exfuncionaria de la alcaldía local, Xenia Gómez Bustamante y a la exinspectora de Policía en 2017, Amalia Jaspen Prens, quienes habrían incurrido en una falta grave debido a la conducta por la cual están siendo investigados.
Según la Procuraduría, la entonces inspectora de la Policía, al no efectuar la orden de demolición, habría incurrido en una omisión de sus funciones “con lo que presuntamente afectó sus deberes funcionales, desconociendo los principios que sirven de protección a la función pública y, por ende, su comportamiento se presenta como sustancialmente ilícito”.
A su vez, Gómez Bustamante supuestamente habría incumplido con su deber de hacer efectiva la medida que contempla la suspensión de las obras en el barrio Pie de la Popa.
Asimismo, el Ministerio Público señaló que durante los trabajos de construcción no se habrían empleado las precauciones necesarias para proteger a los vecinos y propiedades aledañas, lo que habría ocasionado daños en las edificaciones vecinas, la cual derivó en una orden de suspensión y demolición de las obras iniciadas.
En ese sentido, los residentes de una vivienda vecina a La Ermita, la cual resultó con graves daños producto de las obras que clausuraron en 2014, iniciaron procesos legales en contra de los representantes de la clínica de quienes mencionaron incumplieron las medidas durante la construcción de la entidad.
Polémica en Cartagena por la construcción de un parque de diversiones junto a un hospital
Una nueva polémica se volvió a presentar en Cartagena en las últimas horas por la inauguración del parque de diversiones Looping Park, el pasado 8 de octubre, en el sector del centro recreacional Napoleón Perea y el Centro Comercial Plaza Colón.
El debate surgió porque este centro de atracciones se encuentra cerca de la zona de urgencias de la Clínica Blas De Lezo. Esta situación la puso en conocimiento César Cárcamo, representante de las Veedurías Comunitarias en el Consejo Territorial de Seguridad Social de Cartagena, quien argumentó que, de acuerdo con las normativas de la ciudad, dicha obra “no tiene sentido” por su ubicación.
De acuerdo con el Artículo 15 del Decreto 948 de 1995, en el que se clasifican los sectores de restricción de ruido ambiental, el principal sector en el cual se debe permanece en tranquilidad y silencio, son las áreas urbanas donde estén situados hospitales, guarderías, bibliotecas, sanatorios y hogares geriátricos. Que estén pensando en hacer un parque de diversiones al lado de un hospital, no tiene sentido”, puntualizó en diálogo con El Universal.
Justamente, Cárcamo argumentó que la queja había sido presentada ante la Secretaría del Interior cuando se supo que avanzaban las obras del proyecto; sin embargo, teme que las peticiones “sigan en trámite” ante la proyectada inauguración del centro de atracciones en los días entrantes.
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