La Fiscalía General de la Nación anunció en horas recientes que Luis Jhon Castro Ramírez, alias ‘El Zarco’, fue imputado por su responsabilidad en tres ejecuciones extrajudiciales, también conocidas como ‘falsos positivos’, las cuales ocurrieron en el corregimiento Villa Carmelo, zona rural de Cali (Valle del Cauca), el 6 de noviembre de 2007.

Según los resultados de las investigaciones, este antiguo miembro del Ejército de Liberación Nacional (ELN) fue el encargado de contactar a tres jóvenes, a quienes engañó con falsas promesas de sacar una supuesta guaca de 200 millones de pesos.

Ya en el lugar de los hechos, todo indica las víctimas fueron obligadas a vestir con uniformes exclusivos de la Fuerza Pública, donde miembros de la Tercera Brigada del Ejército los hicieron acostar boca abajo y les dispararon a quemarropa.

Las unidades militares reportaron lo sucedido como ‘bajas en combate’ y presentaron a las víctimas como integrantes de un grupo de extorsionistas con los que, supuestamente, habían sostenido un enfrentamiento. Además, los soldados en cuestión afirmaron que les fueron incautados un fusil Galil calibre 5.56, una pistola y un rifle.

Sin embargo, las autoridades que llegaron a inspeccionar el lugar encontraron una vainilla calibre 7.62 que, de acuerdo con las pruebas de balística, no corresponde a las armas encontradas junto a los cuerpos.

De ese modo, una fiscal de la Dirección Especializada contra las Violaciones a los Derechos Humanos imputó a Luis Jhon Castro Ramírez por delitos de homicidio en persona protegida y concierto para delinquir agravada.

Cabe mencionar que esta es la segunda formulación de cargos contra alias ‘El Zarco’ por ejecuciones extrajudiciales, desde que fue capturado en España y enviado a Colombia. En la primera, realizada el pasado 15 de septiembre, se le imputó por el reclutamiento y posterior muerte de 14 personas en tres hechos distintos ocurridos en Ibagué, Guamo y Coyaima (Tolima), entre febrero y junio de 2008.

‘El zarco’ inició su vida delictiva vinculándose al ELN desde temprana edad. Allí se encargó de colaborar con extorsiones, tráfico de sustancias ilegales y homicidios. Entre los casos de asesinatos en los que participó están los ‘falsos positivos’ que se habrían perpetrado entre 2007 y 2008. Las autoridades tendrían pruebas de que en esa época entregó al menos a 17 personas al Ejército Nacional para ser presentados como combatientes dados de baja en combate.

Según la Fiscalía, este hombre habría empezado a reclutar potenciales víctimas para los ‘falsos positivos’ cuando conoció al sargento Rubiel Bustos Escarraga, alias Mauricio, quien le pidió “colaborar” a cambio de ayudarle con su proceso de desmovilización del ELN. Esa colaboración se trataba de asesinar civiles inocentes.

Esta información fue confirmada por Rafael Ricardo Rincón Quitora, uno de los soldados vinculados en los ‘falsos positivos’, en medio de una declaración que hizo ante la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP).

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