Lido Pimienta, la primera colombiana que compone para la Orquesta de Ballet de Nueva York

Lido Pimienta enmarcó su nombre en la historia de la Orquesta de Ballet de Nueva York. La barranquillera se convirtió en la primera mujer colombiana en componer una pieza musical para la compañía, y en la segunda en la historia en lograrlo. La artista, caracterizada por se una de las más críticas frente a la industria, y por poner sus opiniones de temas coyunturales en sus canciones, fue escogida por Andrea Miller, una coreógrafa que, de la mano de Lido, creó el primer equipo femenino que trabajó en conjunto para darle vida al montaje. Fue el pasado jueves 30 de septiembre cuando ‘Sky to hold’, resultado del trabajo de ambas artistas, se presentó en la ciudad estadounidense.

“Es la primera vez que hago algo tan grande, y siempre estoy luchando contra la sensación del síndrome del impostor. Pero me dije: Incluso si nunca antes había compuesto para 66 músicos, hay 66 canales en la música que produzco. Si Andrea piensa que soy digna, ¡está bien!”, contestó Lido en una entrevista con The New York Times.

Fue un mes de concentración y encierro el que atravesó Lido para crear la pieza. En medio de la soledad y el aislamiento, la colombiana encontró la inspiración, según comentó el noticiero del Canal Caracol. “Tengo acceso a toda la orquesta, ellos podrían tocar cualquier melodía que yo les dé. Empecé a escribir desde cero (...) no teníamos ni idea de que yo iba a ser la segunda compositora en la historia del ballet de Nueva York”, agregó Lido Pimienta que, además, recordó que estuvo en un proceso de seis meses de trabajo. La intérprete detrás de ‘eso que tu haces’ se inspiró en los sonidos autóctonos colombianos que tanto defiende y la identifican.

“Estos ritmos me vieron crecer. Me ha influenciado la manera en la que cantan las cantaoras del río Magdalena, los ritmos de Palenque. Compraron maracas, compraron un llamador y yo les enseñé a tocar”, explicó para ese mismo medios de comunicación. La cantante estuvo interpretando, en vivo, su creación, al lado de los y las bailarinas que, al mismo tiempo, danzaban al ritmo de la composición que incluyó al vallenato, el dembow, algunos ritmos propios de comunidades indígenas, electrónica, entre otros sonidos que caracterizan el estilo de Lido.

“Mi trabajo era traducir esas ideas y sentimientos en música. Como alguien de Colombia, conozco esa sensación del sol golpeando tu cara mientras te acuestas en una hamaca. Eso me dio una introducción; una sensación de calor, pero también de tensión”, dijo para el diario norteamericano, en donde, añadió, “soy cantante y diría que mi trabajo es sobre la narración de historias, así que una vez que tuve esa idea, en mi cabeza estaba sucediendo toda esta película. Pensé: ‘debería decírselo a Andrea’, así que me senté y escribí e ilustré la historia que vi”.

“¿Pueden sentir el orgullo al estar sentada aquí? Wayuú, de Riohacha, Villanueva, Barranquilla, cantando música escrita/compuesta por mí. La segunda mujer que lo ha hecho en 70 años de su historia”, escribió Lido en su cuenta de Twitter. Pimienta tuvo compañía de un compatriota en escena, pues, fue el diseñador antioqueño Esteban Cortázar, quien estuvo a cargo del vestuario. Para The New York Times, Pimienta resaltó la importancia de la participación suya y la de Andrea, pues, al ser mujeres, entienden lo difícil que ha sido para otras colegas llegar a estar en la posición que ellas, por su talento, lograron.

“Siento tristeza por todas las mujeres talentosas que no llegaron a coreografiar o componer u obtener reconocimiento en su tiempo”, manifestó Andrea antes de que Lido resaltara que ella, además de ser mujer, contaba con otras características que, históricamente, han sido rechazadas y juzgadas. “Soy sudamericana, indígena, negra, morena, inmigrante (...) así que tener este apoyo y confianza es simplemente increíble”, enfatizó.

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