La historia de la primera policía trans en Colombia, destituida por robar una crema para la cara

Fue conocida a comienzos del 2021 cuando se reveló su historia sobre como logró ser reconocida al interior de la Policía como mujer tras

Guardar

El 4 de octubre, se llevó a cabo la lectura del fallo del proceso de la Policía Nacional contra la patrullera, Andrea Cortés Guarín, la primera agente de policía trans en el país, luego que fuera denunciada por el hurto de una crema en un establecimiento comercial.

Los hechos quedaron grabados por una cámara de seguridad el video y quedo registrado como la agente de la Policía tomó la crema en un descuido de la vendedora y luego, la metió en una bolsa. Ante tal hecho la Policía señaló que Cortés cometió una falta muy grave “al apropiarse de pertenencia de particular en beneficio propio”, razón por la cual quedó destituida e inhabilitada por 11 años para ejercer cargos públicos.

Pese a que dicha noticia ha sido compartida y replicada por varios medios, la historia de Cortés, se dio a conocer mucho antes por haber sido la primera mujer trans reconocida en la institución, luego de una batalla jurídica y un proceso de completa transformación.

En 2016, Cortés se graduó para ingresar a la Policía Nacional de Colombia; sin embargo, en ese momento para sus compañeros era Fabio Cortés Guarín y la designaron al departamento del Cauca. Un año más tarde, la patrullera decidió regresar a su natal Bucaramanga y realizar el proceso de papeleo para ser Andrea.

La decisión la tomo luego de que evaluada por una psicóloga que le sugirió que ella informará a sus superiores sobre su identidad como mujer trans y de esta forma poner en regla sus documentos, y que lo hiciera legalmente cambiando su nombre.

“En un permiso viajé a Bucaramanga (en septiembre de 2017), y fui a la Registraduría y cambié mi registro civil y mi cédula. Y regresé con una contraseña que me identificaba como Andrea Cortés Guarín”, señaló.

Pese a que hizo el procedimiento que correspondía, inicialmente recibió un ‘No’ por respuesta con el argumento de que cuando se incorporó a la institución lo hizo como hombre. Por lo que en el 2018, la patrullera instauró una tutela a la institución por no aceptar cambiar su documentación como mujer. Tiempo después recibió la respuesta y el fallo fue a su favor.

Luego de la gran noticia que le dio la Corte, la expatrullera continúo con su proceso que incluye tanto tratamiento hormonal como algunas modificaciones estáticas. Entre lo que logró con éxito una cirugía en sus cuerdas vocales que se realizó en Barranquilla a finales de 2020, con el otorrinolaringólogo Antonio Ballestas.

Sin embargo, en el mes de julio contó que por cuenta de una de estas modificaciones al igual que muchas famosas, tuvo que batallar contra los biopolímeros que estaban afectando su salud.

Cortés Guarín explicó que “hay muchas niñas que pasan por lo mismo. Es una cárcel que lleva una misma, que uno carga y uno no le dice a nadie por el miedo al qué dirán”. La muer de 26 años agregó que los biopolímeros son una “bomba de tiempo” en el cuerpo de aquellas que se los aplican y que “uno a veces no se quita eso por miedo a que le quede la cola deforme o la cicatriz”.

Es importante recordar que, los biopolímeros son un producto que se ha utilizado en los últimos años en tratamientos estéticos, especialmente en el área de los glúteos. Con el paso del tiempo, se han conocido los casos de muchas mujeres que años después de tener estos químicos en su cuerpo les genera una reacción negativa y deben ser retirados de urgencia a través de una cirugía que dejar una gran cicatriz.

SEGUIR LEYENDO

Guardar