Mejía Emma Mejía llegó a la política “por casualidad”, tras estudiar Comunicación Social en la Universidad Pontificia Bolivariana de su ciudad natal y periodismo en la Universidad del Valle, en Cali (suroeste). Su carrera, no obstante, es tan rica como variada, política liberal con un fuerte compromiso social, ha sido desde mediadora con las FARC hasta presidente de la Fundación Pies Descalzos de la cantante Shakira y modelo en su juventud.
Sin embargo, sus trabajos más reconocidos los hizo en Colombia luego de que César Gaviria, que sucedió a Galán como candidato, la nombrara secretaria general de su campaña y, tras ganar los comicios, la designó Consejera Presidencial para Medellín, durante esos años (1990-1993), la ciudad vivió tiempos difíciles y violentos producto del poder que había adquirido el capo Pablo Escobar. Sin embargo, Mejía ejerció un verdadero apostolado en las barriadas de esa ciudad, llevando alivio y asistencia social a las familias más pobres.
En 1993, Gaviria la envió como embajadora a España y, con el nuevo presidente Ernesto Samper, fue ministra de Educación y de Relaciones Exteriores, entre 1995 y 1998. De su trabajo, durante la época más difícil que vivió Colombia a manos del narcotráfico, logró sacar la experiencia suficiente y el análisis más detallado para entender la situación actual del país, es así como publicó su libro de memorias “El camino que abrimos”, en el que hace un relato de su vida y de los acontecimientos de los cuales fue protagonista o testigo durante todos los años que ha permanecido en la política.
La diplomática aborda en su libro el problema del narcotráfico y es tajante al afirmar: “La guerra contra las drogas ha fracasado”, y aunque defiende “una nueva mirada” para este problema, se declara realista al señalar que “la legalización está muy lejos del escenario internacional” porque es algo que no depende de unos pocos países sino que tiene que ser “un proyecto mundial, multilateral”.
Proceso de paz y líderes sociales:
En una entrevista con el diario La Razón, Mejía aclaró que, desde sus origenes, Colombia ha tenido diferentes procesos de violencia, el problema es que estos siguen persistiendo, por eso cree que el Proceso de Paz es el camino correcto para acabar con gran parte de las falencias del país, “en Colombia faltan compromisos y pactos nacionales amplios, como en la época de Galán, y eso cuesta muchas vidas y mucho dolor”, mencionó.
En palabras textuales, compartidas y publicadas por el diario La Razón, la mujer aseguró que:
“Estoy convencida de que a pesar de la presencia del narcotráfico, de las disidencias de las guerrillas y de que somos ese país violento, el proceso de paz es el camino correcto. Si uno va a las veredas en el campo es emocionante ver como estamos armando ciudadanía rural y urbana. Pero sí, es muy doloroso ver tantos nombres reconocidos asesinados cuando han estado batallando tan duramente. Es como cuando Escobar mataba a jóvenes en las comunas. Ahora matan a líderes sociales en los parques naturales”.
Por otro lado, Mejía dedica buena parte de su libro a la educación, Ministerio que dirigió entre 1995 y 1996, defiende que ésta debe ser una prioridad nacional y una política de Estado.”No vamos a sacar al país de la crisis mientras no haya un compromiso del Estado que brinde a la población opciones y oportunidades. Educación, educación, educación, como lo pregonaron Jorge Eliécer Gaitán y Luis Carlos Galán, ambos ministros de Educación en su tiempo”, señala en su libro.
Razón por la que ve con muy buena cara que haya elecciones el otro año y que no haya reelección ya que esto permitirá dar un nuevo panorama a las necesidades del pueblo colombiano ajustar procesos que son necesarios para el país.
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