La Procuraduría General de la Nación pidió al juez tercero penal municipal con funciones de control de garantías de Soacha acceder a la petición de la Fiscalía y enviar a un centro carcelario a Fabián Danilo Barona Rojas, detenido por su presunta participación en el homicidio del capitán de la Policía, Jesús Alberto Solano Beltrán.
En desarrollo de las audiencias de legalización de captura, imputación de cargos y solicitud de medida de aseguramiento, la procuradora 7 Judicial Penal de Bogotá, en desarrollo de su función de intervención, señaló que existía una inferencia razonable de la participación de Barona Rojas en los delitos imputados, razón por la cual era procedente tanto la medida de aseguramiento solicitada, como su remisión a un centro carcelario.
La representante del Ministerio Público precisó que las medidas adoptadas se justificaban, teniendo en cuenta que la Fiscalía acreditó el peligro para la comunidad y el riesgo de no comparecencia de Barona Rojas al proceso.
Por ese hecho, el juez profirió medida de aseguramiento, de detención preventiva sin beneficio de excarcelación, en contra del procesado, por su presunta participación en los delitos de homicidio agravado, porte ilegal de armas y hurto calificado y agravado.
Barona Rojas fue capturado este jueves por miembros de la Policía nacional, dentro de la investigación adelantada por el homicidio del capitán Solano Beltrán, quien fue agredido por varias personas en la noche del 28 de abril, en Soacha, Cundinamarca, durante las manifestaciones registradas en ese municipio.
En su momento, la Fiscalía General de la Nación presentó ante la justicia, según videos de cámaras de seguridad, testimonios y evidencia física, técnica y forense, a Jesús Antonio Castillo, alias El Enano; Juan Sebastián Vélez Mesa y Maicol Steven Vélez Mesa.
De acuerdo con los elementos de prueba, el oficial documentaba con su celular los desmanes y grababa la manera cómo manifestantes intentaban destruir un cajero automático de una entidad bancaria en Soacha. Sin embargo, ante la violenta reacción de la multitud, corrió para ponerse a salvo.
El material probatorio da cuenta cómo, el uniformado fue perseguido por cerca de 20 personas, entre ellas los tres imputados, quienes supuestamente lo alcanzaron, golpearon y atacaron con piedras y armas cortopunzantes lo que desencadenó en su muerte.
Adicionalmente fue despojado de sus pertenencias entre ellas su arma de dotación. El 30 de abril, el jefe de la SIJIN en Soacha murió en un centro asistencial por la gravedad de las heridas causadas.
Sin embargo, el pasado 22 de julio un juez primero penal del Circuito de Soacha ordenó la libertad inmediata de Maicol Steven Vélez Mesa, alias ‘Colombia’, argumentando que, a su juicio, el aporte del sindicado no fue determinante porque “no aparece reseñado como uno de los perseguidores (del oficial)”.
El juez tuvo en cuenta la reconstrucción de los hechos que hizo la Fiscalía donde alias ‘Colombia’ habría actuado para auxiliar a su hermano, Juan Sebastián Vélez Mesa, otro de los presuntos asesinos del capitán, después de que el uniformado le disparara. Además, dijo que compartía algunos de los argumentos de la defensa del sindicado que dicen que, “no podría asumirse que las personas que lo agredieron (a Solano) deban responder por el homicidio”.
Para el fiscal del caso, hubo sevicia en este crimen. “Con sevicia, este grupo de personas ocasionaron sufrimiento excesivo a la víctima propinándole seis heridas con arma blanca, golpes con rocas y palos, además de puños y patadas, fue una actitud despiadada de una multitud en contra de una sola persona con un ánimo frío de hacer daño excesivo solo por estar en frente de un uniformado”, puntualizó ante la juez.
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