A las 8 de la noche del 28 de septiembre, dos hombres colombianos departían en un bar en una zona marginal y plagada de expendio de droga en Sao Paulo, centro empresarial y financiero de Brasil. Lo que no sabían era que una pelea iba a terminar en una provocación que hizo que otro sujeto les propinara varias heridas de arma blanca en la espalda, acabando con ambas vidas.
En la zona de Campos Elíseos, muy cerca a la popular Cracolandia, principal zona de consumo, compra y venta de estupefacientes duros; los hombres cayeron a la calle tras recibir el ataque desde atrás. Posterior a este, varios transeúntes se acercaron para ver qué pasaba y socorrer a los extranjeros.
En los videos de los hechos, capturados por cámaras de seguridad y difundidos por el medio Globo, se ve cómo dos hombres con camisetas blancas caminan tranquilamente por una calle concurrida pero llena de desechos. Al intentar pasar hacia la otra cuadra, un hombre con gorra y chaqueta corre para atacarlos por la espalda.
Uno de ellos, a pesar de tocarse la cabeza, sale corriendo al sentir la puñalada. El otro, por su parte, se queda tendido en el suelo. Frente a los hechos un tumulto de personas indaga lo ocurrido y busca socorrer a los hombres.
Los delincuentes subieron a las víctimas a un taxi a la fuerza. El conductor, minutos después de haber recibido a los hombres, puso sus cuerpos en un andén y contactó a las autoridades. No se conoce si los hombres fueron ingresados al automóvil sin vida o si aún presentaban signos vitales.
Todo apunta a que la Policía Federal se dio cuenta del asesinato por la denuncia de los transeúntes que presenciaron el hecho. Mientras los agentes se encontraban resolviendo un robo en una calle cercana, las personas apuntaron al charco de sangre que dejaron las víctimas del ataque.
Según La Folha de Sao Paulo, el taxista llamó a las autoridades y fue ubicado por la Policía Militar de la ciudad en la calle Conselheiro Nébias, no muy lejos de Campos Elíseos y Cracolandia. Junto a él, los cuerpos de los colombianos puestos en la acera.
Después de dar con los cuerpos, las autoridades determinaron que una de las víctimas se llama Luis Ángel y tiene 24 años de edad. Por lo pronto, se presume que es ciudadano colombiano y su compañero aún no ha sido identificado.
De acuerdo con el taxista, en conversación con el medio local, fue amenazado para llevarse los cuerpos. “Circulaba por la calle Aurora y la calle Guaianazes, momento en el que un grupo de personas me detuvo, obligándome a ayudar a dos heridos, aparentemente con un cuchillo”, aseveró.
Los hallazgos de la Policía Civil
Por lo pronto, según la Secretaría de Seguridad Pública, el taxi fue examinado y devuelto a su dueño. El caso fue registrado como homicidio y es investigado por el Departamento de Homicidios y Protección Personal del Estado (DHPP). Hasta hoy, ningún sospechoso ha sido detenido.
De acuerdo con Roberto Monteiro, delegado seccional de la Policía Civil, se trata de un acto de quienes tienen experiencia en asesinatos. Además, entre otros hallazgos, se dio con una SIM Card de celular en el bolsillo de una de las víctimas, junto a 2.500 reales en efectivo, equivalentes a 1.760.452 pesos.
“Él golpea a la primera víctima con una puñalada en la parte posterior de la cabeza y luego golpea a la segunda víctima. (...) Una de las víctimas es colombiana. Y la otra víctima, aún no identificada, posiblemente también sea colombiana”, expresó el funcionario de la Policía Civil, quien abre la posibilidad de que el segundo asesinado no sea de nacionalidad colombiana.
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