La Fiscalía cuenta con cinco personas capturadas por el homicidio del líder estudiantil de Popayán, Esteban Mosquera. Aunque dos de ellos pertenecían a la banda delincuencial Los Ovejos, al parecer serían intermediarios y autores materiales de un crimen planeado por familiares del joven.
Esteban Mosquera tenía 26 años de edad cuando fue asesinado el pasado 23 de agosto. Estudiaba música en la Universidad del Cauca y había intensificado su liderazgo social tras haber sido víctima de la violencia policial, al perder un ojo por el impacto de un gas lacrimógeno disparado por el Esmad durante manifestaciones en 2018.
El joven fue atacado por hombres armados a bordo de una motocicleta que le propinaron varios disparos cuando se encontraba en el barrio La Palma de la capital del Cauca. En principio, se relacionó el crimen con su liderazgo y las autoridades ofrecieron hasta 50 millones por información de los responsables. Ahora, uno de los autores materiales, asegura que fueron contratados por un intermediario de un tercero posiblemente de la familia del joven.
Breiner Alexander Narváez Ruíz y Esteban Narváez Ramírez son dos de los capturados desde el pasado 29 de agosto por parte de la Fiscalía, quienes aceptaron su responsabilidad en los hechos y se encuentran imputados por el delito de homicidio agravado.
El primero de ellos, según informó el diario El Tiempo, confesó que un día antes del crimen recibió a Junín Édgar Alexánder Méndez y Micheline Vásquez Murillo, quienes le ofrecieron cinco millones de pesos por asesinar a una persona.
Según su testimonio, Méndez y Vásquez le dijeron que a la víctima “la familia lo está mandando matar para quedarse con la herencia”. Además, tenían información de las rutinas de Mosquera y eso permitió que el crimen se ejecutara en cuestión de horas.
Durante la noche del domingo anterior, asegura el diario, los sicarios se encontraron con los intermediarios, quienes les entregaron el revólver y acordaron que Micheline Vásquez realizaría el seguimiento para ejecutar el crimen.
Breiner Narváez describió la vestimenta de la mujer y los lugares que recorrió el joven antes de recibir la orden para ejecutar el crimen, que coincidieron con las imágenes de 57 cámaras de seguridad con las que cuenta la Fiscalía para la investigación.
Mosquera fue a un banco en el Parque Caldas con su perro y se devolvió a la casa. En el trayecto de regreso la mujer ordenó el crimen y ambos se dirigieron al lugar para disparar. Narváez lo impactó en el pecho y mientras Mosquera pedía ayuda, le propinó otro disparo para causarle la muerte.
La Fiscalía cuenta con siete teléfonos celulares incautados, entre ellos el que usó el sicario para coordinar el crimen. También se cuenta con un arma traumática, una gorra y una chaqueta blanca. Estos dos últimos elementos coinciden con las prendas que habría usado el conductor de la motocicleta involucrada en el ataque armado.
Así mismo, el ente acusador ha logrado establecer la línea de tiempo, modo y lugar de los sucedido que permitió poner en evidencia a los procesados. Tiene identificadas la planeación del crimen y el seguimiento realizado al líder estudiantil y la ruta que usaron para escapar.
También hay un menor de edad, de 17 años, que se encuentra vinculado al crimen pero fue capturado previamente por otro proceso. Se encuentra a disposición de la Fiscalía para determinar su participación en los hechos.
Micheline Vásquez Murillo y Édgar Alexander Méndez (alias ‘El Pollo’) no han aceptado los cargos de porte ilegal de armas y homicidio agravado, pero recibieron medida de aseguramiento en centro carcelario. Ellos son quienes pueden establecer quienes fueron los que ordenaron el crimen, porque habrían mantenido comunicación constante como intermediarios, recibieron el dinero para pagar a los sicarios y se quedaron con un millón de pesos del pago final.
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