Liberan a dos de los soldados secuestrados por el ELN

Autoridades nacionales celebraron, este 18 de septiembre, la liberación del sargento Fabián Andrés Espitia Calderón y el soldado Elvis Andrés Flórez Taborda, quienes se encontraban secuestrados por el Ejército de Liberación Nacional desde el pasado 7 de septiembre.

Valga recordar que la desaparición de los dos uniformados había sido confirmada por el Ejército Nacional en la tarde del pasado miércoles 8 de septiembre. De acuerdo con la institución castrense, ambos adelantaban tareas de corte administrativo en el municipio de Tame, Arauca, y nunca regresaron a la base de la Décima Octava Brigada a la que pertenecen.

Igualmente, habían informado que “según las versiones iniciales, un grupo armado organizado (GAO) podría ser el responsable de la desaparición de nuestros militares; sin embargo, el desarrollo de las investigaciones logrará confirmar o desvirtuar esta hipótesis. En esta región delinquen el GAO ELN y el GAO residual estructura décima”.

Sería el ministro de Defensa, Diego Molano, quien confirmaría un día después, que ambos militares se encontraban, efectivamente, en poder de dicha organización insurgente.

En el mismo anuncio, el jefe de la cartera de seguridad señaló que “hay que darles un mensaje a las disidencias de las Farc y el ELN, que no pueden ni intimidar, ni amedrentar a nuestra fuerza pública y los tienen que liberar ya, que dejen de mandar videos, que los liberen ya porque nuestra fuerza pública va a lograr desmantelar esas organizaciones como es la tarea y el objetivo principal”.

El secuestro lo reconfirmó el ELN el 13 de septiembre por medio de un comunicado oficial, en el que aseguran que Espitia y Flórez “desarrollaban actividades de espionaje en zona rural del municipio de Tame departamento de Arauca”. También advirtieron que “nuestra fuerza guerrillera los captura con sus armas de dotación, cuando se movilizaban por el área de control nuestro. A los prisioneros se les está dando el trato humano de acuerdo a la realidad de guerra que se vive en la región”.

La misiva de cinco puntos también advierte que “anunciamos que en los próximos días serán liberados con los protocolos humanitarios correspondientes”, siempre y cuando el Gobierno Nacional cesara todos los operativos militares que se estaban desarrollando en la zona donde se encontraban los secuestrados.

Eso fue, precisamente, lo que sucedió este 18 de septiembre, cuando finalmente se presentó la liberación. El hecho fue confirmado por la Defensoría del Pueblo, que informó del mismo por medio de sus redes sociales.

“Hicimos parte de la comisión humanitaria que recibió —junto a la Iglesia Católica y el Comité Internacional de la Cruz Roja en Colombia (CICR)— al sargento Fabián Andrés Espitia Calderón y al soldado Elvis Andrés Flórez Taborda, quienes estaban en poder del Frente de Guerra Occidental (FGO) del ELN. La liberación se produjo en el pie del monte araucano”.

Los militares fueron valorados por el equipo del CICR, que confirmó que se encontraban en adecuadas condiciones de salud para su traslado.

Tras ser liberado, el soldado Flórez manifestó “primeramente darle gracias a Dios nuestro señor por permitirme nuevamente llegar al seno de mi hogar, de mi esposa, de mi niño. Darle gracias a la Cruz Roja Internacional, a la Defensoría del pueblo por permitir esta gran labor”.

Desde el Ejército Nacional enviaron un mensaje de agradecimiento para todas las entidades involucradas en la liberación, así como para “nuestros compatriotas por su solidaridad y acompañamiento con las familias de nuestros militares y con la institución. El secuestro es un delito que viola los derechos humanos e infringe el DIH”. También reportaron que la Unidad Militar ya inició los protocolos internos para la atención sicosocial de los uniformados y sus familias.

A su turno, el Ministro Molano emitió un mensaje de recibimiento para Espitia y Flórez. “Bienvenidos a la libertad Sargento Fabián Espitia y soldado Elvis Flórez, secuestrados 11 días atrás por los narcocriminales del ELN. Gracias a la comisión humanitaria de Iglesia Católica y CICR-Co. En nombre de Colombia les digo: ¡Bienvenidos a la libertad!”.

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