Polémica por la posibilidad de prostíbulos en barrios residenciales en el nuevo POT de Bogotá

El concejal del Centro Democrático Andrés Forero, expresó que el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial (POT) que presentó la alcaldesa Claudia López ante el Concejo de la ciudad tiene un punto que lo incomoda y es que, según él, permitiría localizar prostíbulos y cines eróticos de hasta 500 mts2 en barrios residenciales como Normandía, Castellana, Chicó, Alhambra, Polo y Bella Suiza.

“Preocupación ciudadana porque POT de @ClaudiaLopez permitiría localizar moteles, prostíbulos y cines eróticos de hasta 500 mts2 en barrios residenciales. ¿Esto se socializó, alcaldesa?”, preguntó el concejal. En las imágenes que comparte muestra apartados del documento y evidencia que se permitirían los “servicios especiales” en algunas zonas residenciales de la capital.

Sin embargo, un funcionario de la administración distrital y que prefirió mantenerse en anonimato, le explicó a este medio que el ‘área de actividad’ donde se podrían desarrollar estas actividades que explica el concejal, se definen como tal porque tienen soportes urbanos, es decir, cuentan con infraestructura como estaciones de Transmilenio, ciclorrutas, parques, etc., lo que las hace aptas para acoger espacios como comercios y servicios.

En el decreto 4002 de 2004, artículo 1, se especifica que servicios de alto impacto como la prostitución o actividades afines, “son aquellos que comprenden cualquier clase de actividad de explotación o comercio del sexo realizados en casas de lenocinio, prostíbulos o establecimientos similares, independientemente de la denominación que adopten”.

El funcionario dijo que la posibilidad de crear estos comercios y de prestar diferentes servicios especiales, que pueden ser hoteles, servicios al automóvil, oficinas, entre otros, se hacen “con el fin de promover una ciudad más próxima para los habitantes, donde se pueda ir, por ejemplo, a toda parte a tan solo 30 minutos a pie. Es por ello, que se reglamenta toda la posibilidad de usos sobre estas áreas, pero esto no quiere decir que ahí se deban hacer”, explicó.

Agregó que el concepto se aborda desde una perspectiva de ciudad y no es correcto verlo por barrios, aunque, “si bien es permitido (la creación de estos espacios), la ley y el parágrafo 2 del artículo 234 lo limitan ya que no permite este tipo de actividades sexuales al ser zonas residenciales”.

Por otro lado, al revisar el artículo 2 del decreto 4002 de 2004 es evidente la imposibilidad de lo que denuncia el concejal. “En los planes de Ordenamiento Territorial o en los instrumentos que lo desarrollen o complementen no se podrán establecer como permitidos los usos que comprendan servicios de alto impacto referidos a la prostitución y actividades afines, en las áreas, zonas o sectores en donde se prevea el desenvolvimiento del uso residencial o cualquier tipo de uso dotacional educativo”.

Este 10 de septiembre la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, radicó ante el Concejo el Plan de Ordenamiento Territorial (POT) que de ser aprobados será la ruta de la ciudad en los próximos 12 años.

“El POT mejora la calidad de vida de los habitantes. Hemos planeado una ciudad en la que se puedan realizar trayectos cortos a pie o en bicicleta, con equipamientos, servicios sociales y de cuidado cercanos. ¡Esto es equidad!”, expresó la mandataria.

Y agregó: “este POT honra el programa de gobierno que propuse y el Compromiso Ambiental por Bogotá que suscribí como candidata, con metas específicas a mediano y largo plazo y con proyectos e inversiones concretas. Prometimos una ciudad más verde e incluyente y le entregamos a la ciudad el POT más verde y con enfoque de género en su historia”.

Hace más de 17 años que se adoptó el último POT que ya está obsoleto a los retos que tiene la capital del país en la actualidad. Entre los objetivos que tiene este documento que radicó la alcaldía, está el proteger la estructura ecológica principal y los paisajes bogotanos y generar las condiciones de una relación más armoniosa y sostenible de la ciudad con su entorno rural.

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