Margarita Rosa de Francisco, la religión no debería ser usada en la campaña: “A Dios y al diablo deberían sacarlos de los discursos políticos”

La actriz y activista le pidió a Gustavo Petro aclarar su opinión y la relación de su movimiento con las iglesias del país

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Gustavo Petro y Margarita Rosa de Francisco. Fotos: Colprensa (Camila Díaz) / Instagram @margaritarosadefrancisco.
Gustavo Petro y Margarita Rosa de Francisco. Fotos: Colprensa (Camila Díaz) / Instagram @margaritarosadefrancisco.

El discurso con alusiones religiosas que dio el precandidato presidencial Gustavo Petro, el pasado viernes 10 de septiembre, en la ciudad de Barranquilla, ha generado múltiples reacciones en las redes sociales y en el ambiente político, incluso, Margarita Rosa de Francisco, una de sus grandes seguidoras, reaccionó.

La tarima con forma de P, donde comenzó oficialmente la campaña política del senador de Colombia Humana, se convirtió por un momento en una especie de pulpito donde Petro habló de Dios y del demonio; para hacer claridad sobre sus creencias.

De acuerdo con la Silla Vacía, dos días antes del evento, comenzó a circular una cadena en Whatsapp, especialmente en mujeres mayores de 65 años, en la que se advertía que el líder de la coalición Pacto Histórico iba a llevar un acto de “brujería y satanismo puro” y que quería convertir a Barranquilla “en la capital para que entren los demonios”.

Petro retomó la cadena en medio de su discurso el viernes: “No estoy proponiendo quemar iglesias, en Bogotá construimos iglesias. No puedo decir que soy ateo, tengo mis creencias. Me eduqué en un colegio católico y ahí acumulé las lecciones de dos personas: San Francisco de Asís y Camilo Torres. O de tres, si contamos a Jesús” y agregó, “acá queremos un pacto con la paz, un pacto con el Jesús que prefiere a los pobres. Donde podamos convivir y querernos entre todos”.

Ese énfasis religioso coincidió con la adhesión a su campaña del movimiento cristiano del Caribe Levántate, que reúne a cerca de 450 iglesias y es liderado por Alfredo Saade, un crítico público de libertades como el aborto y el matrimonio igualitario.

Ante este hecho y pese a que no dio nombres, la actriz, que ha sido una de las grandes defensoras del Pacto Histórico, comentó en redes sociales que las alusiones religiosas deberían ser apartadas de la política. “A Dios y al diablo deberían sacarlos de los discursos políticos y de los partidos de fútbol”, afirmó Margarita Rosa en su cuenta de Twitter, donde acumula 2,2 millones de seguidores.

Pero sus afirmaciones no han quedado ahí, pues, en las últimos horas, la famosa le pidió a Gustavo Petro y su coalición hacer claridad sobre su postura frente a la iglesia.

“A ver, ¿Cómo es lo de los cristianos y Petro?”, escribió y agregó “muy importante sí es que Gustavo Petro y los demás candidatos del Pacto Histórico nos cuenten su posición ante la Iglesia, institución, como casi todas en este platanal, también muy desprestigiada. ¿Qué se va a pactar? Esa sería mi pregunta”.

Es importante recordar que en el pasado, al respóndele a una seguidora la presentadora aseguró no creer en Dios. La mujer en forma irrespetuosa escribió a De Francisco: “Matador y Margarita Rosa, igualitos, con la cabeza destrozada por la droga, sin valores, blasfemos, están poseídos por el demonio. Por eso este mundo está como está; aunque no crean, hay un Dios que les cobrará factura”.

Ante la ofensa la actriz respondió “Afortunadamente no creo en su Dios inmundo” y tiempo después publicó: “Yo creo en Diosa”.

Solo el 1% de los colombianos votaría por un candidato ateo a la Presidencia

Pese a que la Constitución Política de 1991 contempla que Colombia es un Estado laico, es decir, no hay una religión o credo impuesto por las autoridades o el poder ejecutivo, de acuerdo con el más reciente estudio del Centro Nacional de Consultoría (CNC) únicamente el 1% de sus encuestados votaría por un candidato ateo para ser presidente en el próximo período 2022-2026.

Los resultados, que se conocieron en la noche del miércoles 8 de septiembre, y que fueron publicados por la revista Semana, evidencian que el asunto religioso y la separación Iglesia-Estado que estipula la carta magna colombiana sigue estando presente en los argumentos de los connacionales para escoger a su mandatario.

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