Encontraron muerta a Pensilvania, 5 meses después de su liberación

La osa andina se perdió de su hábitat natural, fue rescatada y recuperada para luego ser liberada, con un GPS; en un santuario de conservación donde fue hallada muerta

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Osa Pensilvania tras ser hallada muerta Foto: Corpoboyacá
Osa Pensilvania tras ser hallada muerta Foto: Corpoboyacá

Hace cinco meses, Corpoboyacá celebró la liberación de una osa andina bautizada como Pensilvania en el santuario de Guanentá, era el primer ejemplar con sistema GPS instalado de vuelta en su hábitat natural. Este miércoles la noticia fue lamentable, al conocerse que fue encontrada muerta.

Herman Amaya, director de Corpoboyacá, informó el hallazgo de la osa andina Pensilvania, cuyo cadáver se encontraba en la vereda Santa Bárbara del municipio de Cómbita, en el departamento de Boyacá. A raíz del hecho, se activó un equipo de investigaciones con las instituciones y las autoridades para conocer qué sucedió.

De acuerdo con la institución ambiental, desde el pasado domingo se intensificó el seguimiento del animal por reportes de la comunidad que la habían visto y un registro de movimiento, a través del collar, que se determinó como lento.

Desde horas de la mañana se desplazaron por el lugar. El lunes, con telemetría satelital del collar, la siguieron hasta que a las 10:00 am. dejó de emitir señal. Casi una media hora después la encontraron, estaba en una zona ampliamente boscosa, ya sin vida.

El cuerpo fue levantado y trasladado a la Fundación Universitaria Juan de Castellanos donde se adelantaron los primeros análisis, que superficialmente no muestran signos de violencia. El reporte macrocóspico indicó que no es una muerte traumática u ocasionada.

“Durante el proceso de necropsia adelantado en el hogar de paso en convenio con Corpoboyacá, pudimos evidenciar que el animal se había alimentado cerca de 12 horas antes de morir”, indicó Cesar Pérez Cuervo, Médico Veterinario y Patólogo de la Fundación Universitaria Juan de Castellanos.

Germán Aponte, médico veterinario y zootecnista de Corpoboyacá indicó que las pruebas histopatológicas y complementarias evidenciarán la posible causa de muerte dentro de 15 días. Sin embargo, hasta el momento no se evidenciaron rastros de proyectiles, perdigones o traumatismos contundentes.

Pensilvania, osa andina en Boyacá. Foto: Corpoboyacá
Pensilvania, osa andina en Boyacá. Foto: Corpoboyacá

La entidad aseguró que la liberación del ejemplar Pensilvania contó con todos los protocolos de monitoreo, 24 horas, los siete días de la semana. Así mismo, hizo un llamado a conocer la importancia de este animal para los bosques de la Región Andina. Los osos andinos son conocidos como los jardineros del páramo y su principal labor es la dispersión de semillas en grandes extensiones.

Hace más de un año, miembros de Corpoboyacá rescataron a la osa, la cual se encontraba en un árbol de zona rural del municipio de Moniquirá, en el sector conocido como Pensilvania, el mismo con el que fue llamada. En ese momento la encontraron con baja condición corporal y alto grado de desnutrición, aparentemente perdida.

El animal también tenía amplio deterioro dental y 10 años de edad. Recibió atención médica y odontológica hasta lograr su recuperación física, incluso se le instaló una prótesis para reemplazar los dientes faltantes.

Después de los exámenes de rigor y con el concepto de la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza, Corpoboyacá decidió liberar a Pensilvania en el corredor de Robles, aledaño al Santuario de Fauna y Flora Guanentá.

“Ella ha sufrido mucho y se recuperó, es una luchadora como todas las mujeres en Boyacá”, señaló en ese momento Mónica Macia, de la reserva de la Reserva Natural Corazón de la Montaña, una mujer dedicada a la protección de los bosques boyacenses. Según dijo, su principal esperanza para Pensilvania era que se reprodujera.

El collar GPS, que la convirtió en el primer ejemplar en el país con ese sistema de monitoreo, la iba a acompañar por un año para verificar que se adaptara al espacio y el ambiente. Día a día se podría hacer seguimiento, con reportes cada dos horas, y saber si llegaba a acercarse a zonas pobladas por humanos.

Pensilvania era un símbolo de la conversación del ambiente, como dijeron los miembros de Corpoboyacá tras la liberación, pero el animal solo duró cinco meses con vida en su hábitat.

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