El invierno no cesa en Colombia y cada vez se reportan más ciudades del país con graves afectaciones por la ola climática; una de las más afectadas es la capital atlanticense, Barranquilla, que completa más de 1.000 familias damnificadas por las fuertes lluvias registradas no solo en esa ciudad, sino también en varios municipios del departamento.
En esa línea, el Instituto de Hidrología, Meteorología y Estudios Ambientales (Ideam) advirtió que en los próximos días habrán crecientes súbitas en la región Caribe colombiana, por lo que tanto Barranquilla como Soledad, Usiacurí, Suan, Santo Tomás, Sabanagrande, Sabanalarga, Ponedera, Polonuevo, Palmar de Varela, Malambo, Candelaria, Campo de la Cruz, Tubará, Galapa, Baranoa y Puerto Colombia están en inminente riesgo.
Y es que una buena parte de los habitantes de esos sectores han expresado su preocupación por las fuertes lluvias que han azotado a sus municipios; muchos de ellos manifiestan no haber evidenciado ese tipo de situaciones desde hace años.
Tal es el caso de Maritza Soto, madre de familia de Palmar de Varela, quien se mostró angustiada por la situación y dijo a la emisora BluRadio: “El agua se nos metió a la casa y no hubo tiempo de reaccionar. Todo se mojó. El nivel nos llegaba a la cintura”.
Otra de las afectaciones que la ola invernal ha traído consigo al departamento atlanticense es el taponamiento de la carretera Algodón, que está entre los municipios Juan de Acosta y Tubará y que ha dificultado el paso vehicular en las últimas horas.
“Hacemos un llamado al Gobierno departamental para intervenir urgentemente la vía, no aguanta más un aguacero, creo que los carros están abocados ni Dios lo quiera a un accidente. Recomiendo a las personas que todavía están usando la vía, que lo hagan con mucho cuidado y precaución”, manifestó el alcalde de Juan de Acosta, Carlos Higgins, en declaraciones recogidas por la emisora Caracol Radio.
Estos hechos afectan, principalmente, a los habitantes del corregimiento de Guaimaral e impide que puedan movilizarse con tranquilidad. Igualmente, reportan medios locales, dificulta la comunicación entre los habitantes.
“Como todos los días llueve, ese pedazo fue bajando y como están pasando muchos camiones pesados de 10, 20 y hasta 40 toneladas, eso va afectando la vía. Nuestro miedo es que ceda toda la carretera y quedar completamente incomunicados”, expresó al diario El Heraldo Ricardo Pino, habitante del sector de loma Mateo, en donde se presenta la emergencia.
Y es que la situación no promete mejorar, de acuerdo con el Ideam, se estima que durante las próximas semanas de septiembre haya un aumento en las lluvias entre 40 % y 60 % por encima de los promedios históricos en el norte de La Guajira y centro del litoral caribe de Magdalena y Atlántico.
Además, advierten que se presume un aumento de las mismas en otras regiones colombianas así: 20 % y 40 % en el resto de Magdalena y Atlántico, así como a lo largo del Cesar, mientras que en Bolívar, Sucre y Córdoba sería entre 10 % y 20 %.
Entre tanto, el Ideam informó que en el caso de la costa colombiana, el fenómeno natural será más intenso e incluso, se podrían presentar tormentas eléctricas y fuertes vientos. “Debido al tránsito de una onda tropical se registran fuertes lluvias y con presencia de actividad eléctrica en sectores de La Guajira, Cesar, Magdalena, Atlántico y Bolívar. Se prevé que las lluvias se mantengan durante las próximas horas en el centro y norte del Caribe nacional”, informó el Ideam. Se espera que el fenómeno se desarrolle gradualmente para “formar una amplia zona de baja presión al final de la semana”.
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