Nuevos detalles de la trágica muerte de una madre y su hija en desierto de Arizona

El país no sale del asombro por la trágica y dolorosa muerte de una joven madre junto a su pequeña hija de 10 años en un desierto en Arizona, Estados Unidos. Claudia Marcela Pineda salió de Colombia el pasado 21 de agosto con la ilusión de reencontrarse con su esposo Hugo Pinzón, quien es el padre de Cristian Pinzón, un pequeño de tres años que milagrosamente sobrevivió a la dura travesía.

Este miércoles, Noticias Caracol reveló nuevos detalles de esta historia. Pineda, meses atrás de iniciar su viaje, interpuso una denuncia porque al parecer recibió varias amenazas en Tunja y estaba adelantando el papeleo para buscar asilo en el país norteamericano.

Por su parte, Pinzón, quien ya está en EE.UU., le dijo al noticiero que ella tomó la decisión de viajar para que su hijo conociera a su padre. “Es un milagro de vida, mi esposa dio la vida para que yo pudiera conocer a mi hijo, porque no lo conozco en persona”, señaló el hombre.

En las últimas horas también se dio a conocer el audio de la última llamada que hizo Claudia Marcela antes de morir. Con sus últimos alientos, la colombiana logró comunicarse con la línea de emergencia 911 para pedir auxilio. En la llamada indicó que se encontraba junto a sus dos hijos y que estaba apunto de desmayarse.

Al fondo de esta llamada, que fue dada a conocer por la cadena de noticias Telemundo, se escucha en medio de su desespero a la pequeña María José, expresando a su mamá que tiene hambre.

Claudia: “Por favor, ayúdenme”

Cordinador de la llamada: “¿Cuántas personas están con usted?”

Claudia: “Dos niños, por favor ayúdenme que me voy a desmayar”

María José: “Mami, tengo hambre”

Claudia: “Ya mi amor”

Cordinador de la llamada: “¿Tiene WhatsApp?”

Claudia: “Sí, señor”

Cordinador de la llamada: “Le acabo de enviar un mensaje para que acepte compartir las coordenadas”

Infortunadamente, en ese momento el celular de Claudia se quedó sin batería, por lo que se dificultaron las labores de rescate.

De acuerdo con la explicación de la coordinadora del 911 en Sonora, Guadalupe Lares, la llamada que Claudia inicialmente se habría cortado por la falta de señal, y posteriormente, no se tuvo más ubicación por la falta de batería del dispositivo. Horas más tarde, la patrulla fronteriza encontró sin vida a Claudia y María José; sin embargo, el pequeño de tres años logró superar la inclemencia del clima, por lo que fue remitido rápidamente a un centro asistencial, donde fue atendido por su alta deshidratación.

“Fue abandonada en el desierto por las personas que ella contrató para cruzar hacia Estados Unidos. Nos llama a la línea de emergencia del 911, se registran los datos, no se puede establecer una buena comunicación ya que tenía 3 % de pila”, indicó la coordinadora encargada de la atención de la línea 911 que recibió la llamada de Claudia.

Sobre el caso, la Cancillería de Colombia informó que está tratando de identificar qué podría pasar con el menor de edad que fue encontrado vivo mientras resuelven la repatriación de los cuerpos.

“El Ministerio de Relaciones Exteriores contactó a la familia de las víctimas mortales, para prestar la asesoría necesaria y orientarlos sobre la posibilidad de repatriar a Colombia los cuerpos o las cenizas de las fallecidas. En cuanto al niño, las autoridades informaron que estará en custodia de un centro de menores de edad de California hasta que se defina con quién permanecería en los Estados Unidos o si regresa a Colombia”, señaló el Gobierno nacional, indicando que hasta el momento el niño está recluido en un hospital de Phoenix.

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