Para Petro, los 165 capturados de la ‘primera línea’ son presos políticos

El senador asegura que la Fiscalía está judicializando la protesta social en lo que sería un delito contra los derechos de los jóvenes, todos acusados por actos de vandalismo y terrorismo

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Gustavo Petro montado en TransMilenio cuando era alcalde de Bogotá. Colprensa/Germán Enciso.
Gustavo Petro montado en TransMilenio cuando era alcalde de Bogotá. Colprensa/Germán Enciso.

El líder de Colombia Humana, Gustavo Petro, se pronunció este domingo 22 de agosto al respecto del balance de capturas entregado por las autoridades colombianas tras el paro nacional que arrancó el pasado 28 de abril. Para el senador de izquierda, los 165 miembros aprehendidos de la Primera Línea son, en realidad, “presos políticos”.

Al menos así lo expresó el político por medio de su cuenta de Twitter, donde citando un informe noticioso al respecto aseguró que “Si han detenido 165 jóvenes de primera línea solo por defender el derecho a la protesta estamos ante 165 presos políticos que todo el movimiento nacional e internacional de derechos humanos debe defender para evitar tamaña arbitrariedad”.

El reclamo del precandidato presidencial por el Pacto Histórico se basa en una infografía elaborada por el diario El Espectador, que indica que las autoridades colombianas capturaron, en el marco de las protestas, a un total de 1.755 personas: 1.547 en flagrancia y 208 por orden judicial, por medio de un total de 199 investigaciones y 65 operativos. De estos últimos, 38 han sido en contra de la Primera Línea, con lo que queda el saldo previamente mencionado.

De manera adicional, el periódico colombiano asegura que las ciudades en las que más se han dado capturas en contra de ese movimiento juvenil, al menos hasta el 25 de julio, son Bogotá (21), Cali (20), Soacha (15), Pasto (10) y Rio Negro (10).

Ante ese balance, Petro continuó su crítica señalando que “Si el fiscal general ha dado instrucción a sus subalternos para judicializar la protesta social, estamos ante un delito y abuso de poder de un funcionario público. Si ha sido explícito en que a los jóvenes que protestan se les acuse de terroristas, estamos ante un delito peor”.

Con esto, el líder de izquierda se refiere a los cargos que la Fiscalía General de la Nación está levantando contra los jóvenes, y que van desde vandalismo y bloqueos extorsivos, hasta terrorismo e instigación a delinquir. No obstante, los abogados de la Primera Línea insisten en que se trata de cargos exagerados, pues sus defendidos incurrieron en actos propios de la protesta social.

En ese sentido, El Espectador recordó lo que han dicho al respecto distintas entidades como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH), que se ha mostrado preocupada por el hecho de que tanto las investigaciones como los cargos han sido denunciadas por un posible perfilamiento de personas a través de caracterizaciones genéricas que generan un ambiente hostil contra la protesta; o Human Rights Watch, que invita a no usar de manera arbitraria la palabra ‘terrorismo’ y pide imputaciones y sanciones proporcionales a los actos cometidos.

Valga señalar, además, que las palabras de Petro llegan en un momento particular, si se tienen en cuenta los cuestionamientos que se han dado a lo largo de la última semana en contra del sistema judicial colombiano por la condena de 63 meses de prisión contra Daneidy Barrera, también conocida como ‘Epa Colombia’. La influenciadora fue acusada de terrorismo, precisamente por dañar una estación de TransMilenio en medio de una jornada de protestas.

Paralelamente, están los que se han levantado en contra del petrismo por financiar a la Primera Línea y hacerles entrega de elementos de protección como cascos, máscaras y guantes. Este último escándalo tienen en problemas, por ejemplo, al senador Gustavo Bolívar, que deberá comparecer en audiencia ante la Corte Suprema de Justicia para dar explicaciones.

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