La Secretaría Jurídica Distrital de Bogotá sancionó este martes a la gerente de la Subred Integrada de Servicio de Salud Centro Oriente E.S.E., Claudia Lucía Ardila Torres, por presuntas irregularidades en un contrato de prestación de servicios.
La Dirección Distrital de Asuntos Disciplinarios de la Secretaría sancionó en primera instancia a la funcionaria con la suspensión de su cargo y una inhabilidad especial por 12 meses debido a esta falta disciplinaria que calificó de gravísima, a título de culpa grave.
“Se comprobó que Ardila Torres intervino en la celebración del contrato de prestación de servicios con la señora Diana Jazmín Ortiz, quien se encontraba inhabilitada por ser hermana de quien ejerció el cargo de directora administrativa de la institución pública para la época de los hechos”, indica el documento de la Secretaría.
Según la entidad, este contrato por un valor de $54.000.000, el cual tenía un plazo de ejecución de seis meses contados a partir del cumplimiento de los requisitos de perfeccionamiento y ejecución del Secop II, fue asignado a la hermana de la directora administrativa, Sandra Ximena Ortiz Muñoz, quien se encontraba inhabilitada para contratar.
“El contrato asignado a Diana Jazmín Ortiz tenía por objeto prestar los ‘servicios de acuerdo con su perfil académico, para desarrollar actividades profesionales especializadas, relacionadas con procesos de mercadeo y venta de servicios de salud, auditorías administrativas en ventas y compras de servicios de salud’”, señala el documento de la entidad.
Sin embargo, Lucía Ardilla, quien ha sido cuestionada en los últimos meses por diferentes hechos por los cuales la Personería adelanta cuatro procesos, interpuso un recurso de apelación, por lo cual esta decisión queda suspendida hasta que la alcaldesa de la capital, Claudia López, resuelva en segunda instancia este caso.
Esta funcionaria, quien ya había sido suspendida de su cargo por la fiesta que se realizó el pasado diciembre en el hospital Santa Clara en medio del segundo pico de la pandemia y sin las medidas de bioseguridad, también había sido denunciada por falta de suministros de elementos de cuidado para los profesionales de la salud, presuntas irregularidades en la contratación y acoso laboral.
El diciembre pasado el Hospital Santa Clara, ubicado en la localidad Antonio Nariño, fue el escenario de una fiesta clandestina de funcionarios del mismo centro asistencial, la cual no contaba con ningún protocolo de bioseguridad, medida de distanciamiento ni uso de tapabocas.
La polémica, denunciada por los concejales Carolina Arbeláez y Andrés Forero, se acrecentó cuando Claudia Ardila, gerente de la Subred Centro Oriente, mintió y ocultó información al Concejo de Bogotá. Tanto así, que Claudia López, alcaldesa de la ciudad, pidió su renuncia por “pérdida de confianza” en la funcionaria. La funcionaria a cargo de la seccional no aceptó la solicitud de la mandataria.
Sin embargo, en marzo fue suspendida por la Personería de Bogotá por tres meses sin derecho a remuneración a causa de hechos relacionados con lo denunciado por los cabildantes. Después, se conoció que, tras cumplir su suspensión, Ardila volvió a su cargo.
El concejal Luis Carlos Leal, de la Alianza Verde, ha elevado denuncias por presuntas irregularidades en contratación, acoso laboral y falta falta de suministro de elementos de bioseguridad para el personal de la salud, entre otras.
“La solicitud de investigación se basa en varias denuncias que hemos recibido del personal de la salud, de usuarios del sistema de la Subred Centro Oriente y fruto del informe de revisoría fiscal presentado a la junta directiva de la misma”, aseveró el cabildante.
SEGUIR LEYENDO