La difícil situación que continúan atravesando los migrantes haitianos, que transitan por Colombia en su romería hacia Estados Unidos y Canadá, se ha convertido en las últimas semanas en uno de los principales focos de trabajo para las autoridades nacionales. Aparte de la Cancillería y Migración, en las últimas horas también se han hecho visibles los esfuerzos de la Defensoría del Pueblo, que busca la manera de proteger los derechos de estos viajeros.
En la tarde de este viernes, la entidad publicó una serie de fotos en las que se puede ver a su director, Carlos Camargo, conversando con los viajeros que completan entre dos y cinco días atrapados en la terminal de transportes de Cali, luego de que el Gobierno nacional emitiera una orden prohibiendo la venta legal de tiquetes de bus a todos aquellos haitianos que lleguen solicitándolos.
De acuerdo con la entidad, “el defensor indicó que en los últimos días, el equipo en territorio de la Defensoría del Pueblo ha podido constatar que diariamente están llegando cerca de 2.500 migrantes a la ciudad de Cali y que las empresas de transporte pueden movilizar hasta 300 personas por día”.
Por dichas empresas, se refiere a las tres autorizadas para participar, a cambio de un precio razonable, en las labores del corredor humanitario inaugurado oficialmente en la mañana de este viernes 13 de agosto, cuando salió un primer grupo de nueve buses, transportando a 240 pasajeros haitianos con destino a Medellín, en coordinación con Migración Colombia, la Personería de Cali, la Policía de Carreteras y, claro, la Defensoría del Pueblo. A estos se unen otros 300 despachados en las últimas horas de la tarde de hoy.
Ante el panorama, y a pesar de los esfuerzos, las autoridades caleñas continúan emitiendo partes de preocupación, pues según explica el alcalde Jorge Iván Ospina, los números de migrantes represados van a volver a crecer durante este fin de semana.
“Pedimos que el gobierno posibilite su inmediato traslado a las zonas donde quieren ir. En este caso, al tapón del Darién para poder ingresar a Panamá. A nosotros nos parece que entre más rápido nos ayude el Gobierno nacional, ellos van a tener mejores condiciones durante su estadía en Cali”, dijo el mandatario.
A su voz se unió la de Harold Andrés Cortés, personero de la capital vallecaucana, quien denunció que “inescrupulosos están aprovechando la condición de vulnerabilidad de estos viajeros y están cobrándoles aproximadamente entre 300 y 350 dólares por persona para desplazarse en vehículos particulares hacia el norte del país dejándolos expuestos a hurtos y en el peor de los casos, a que caigan en redes de microtráfico”
En ese sentido, Camargo señaló que, “los migrantes siguen mostrando preocupación ante las mafias que se aprovechan de su situación, por lo que hizo un llamado a las autoridades para que den con los responsables de estos actos”. Después de todo, el propio director de Migración, Juan Francisco Espinosa, ha reiterado en numerosas ocasiones esta semana, que no son pocos los coyotes que cobran hasta 2.500 dólares por migrante, a cambio de transporte hacia el Urabá antioqueño.
El mismo funcionario recalcó, también, que en lo que va corrido del año se han logrado unas 240 capturas por tráfico de migrantes. Entre estos se incluyen los 31 aprehendidos en una mega operación conducida por la Dijín de la Policía Nacional y la Fiscalía, en coordinación con el Servicio Secreto de los Estados Unidos y la Policía de Ecuador, a mediados de junio pasado.
Según Espinosa, “por la posición privilegiada del país hay paso de migrantes hacía estos países. Registramos en el último mes 12 mil migrantes en Necoclí, ahora estamos por debajo de los 4 mil migrantes”. No obstante, advirtió que no se trata de nada nuevo, pues el flujo de personas en transito, principalmente de origen haitiano, se ve en el territorio nacional desde hace 15 años.
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