Este viernes 13 de agosto, la Defensoría del Pueblo solicitó a las autoridades en Colombia proteger a las comunidades que viven en el municipio de Dagua, Valle del Cuaca, ante el riesgo de un incremento de las acciones violentas por parte de las disidencias de las FARC.
A través de una alerta temprana, la Defensoría advirtió que existe un riesgo para los habitantes de la cabecera municipal y los corregimientos de El Limonar, El Placer, El Danubio, El Queremal, Los Alpes, La Cascada, Santa María, La Esmeralda y Providencia, donde se encuentra el cabildo indígena Nuevo Despertar, debido a la presencia de grupos residuales que buscan controlar este corredor hacia la zona Pacífica.
“La Defensoría del Pueblo emitió esta alerta temprana para que las autoridades nacionales, regionales y locales, civiles y de la fuerza pública, tomen acciones urgentes y los grupos armados ilegales no sigan afectando a los dagüeños. Pero esto también requiere inversión y trabajo social, para que los violentos no tengan cabida ni afecten las vidas de los 46.019 habitantes de este municipio”, señaló el defensor del Pueblo, Carlos Camargo.
En este documento emitido luego de un análisis del Sistema de Alertas Tempranas (SAT) se advierten riesgos relacionados a homicidios selectivos, desplazamientos forzados, reclutamiento de menores y amenazas, contra la población, por parte de la ‘Columna Móvil Jaime Martínez’ que se encuentra realizando un avance hacia la costa Pacífica de este departamento.
En ese sentido, la Defensoría señaló que este grupo residual de las desmovilizadas FARC puede cometer acciones violentas con una altísima posibilidad de afectar a los ciudadanos de esta región y a sus bienes, debido a que se presume estaría detrás de la intensificación de las acciones bélicas y de control territorial que se ha presentado recientemente.
Según han documentado las autoridades, desde el pasado 12 de mayo se han presentado hechos como el hostigamiento en el casco urbano de Dagua; el lanzamiento de una granada contra establecimientos comerciales; ataques contra la estación de la Policía; el desplazamiento de los indígenas que se encontraban en una vivienda en el cabildo Nuevo Despertar, para utilizarla como una trinchera.
“Estos graves hechos que afectan los derechos de la población, estarían ocurriendo debido a que la Columna Móvil Jaime Martínez continúa en un avance hacia el noroccidente para llegar al Pacífico vallecaucano con dos intenciones: 1) detener el impulso del ELN en su propósito de fortalecerse en el Valle y en Cauca y para unirse con sus estructuras del sur del país; y 2) para tener un control territorial del corredor que comunica el sur del Valle del Cauca con el Pacífico y el Cañón de Garrapatas”, concluyó la Defensoría.
Pero el Valle del Cauca no es el único departamento afectado. Debido a los hechos de violencia que se han presentado durante las últimas semanas en el sur de Bolívar, la Defensoría del Pueblo emitió este jueves una Alerta de Inminencia para los municipios de Montecristo, Morales, Arenal y Santa Rosa del Sur.
De acuerdo con la Defensoría, las acciones del Clan del Golfo y el Ejército de Liberación Nacional (ELN), incrementan el riesgo de enfrentamientos armados en medio de la población civil, así como homicidios, amenazas a líderes sociales, comunales y defensores de derechos humanos, reclutamiento forzado de niños, niñas y adolescentes, y desplazamientos forzados.
Asimismo, el defensor del Pueblo, Carlos Camargo, informó sobre el retorno de por lo menos unas 2.400 personas de la zona.
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