En las últimas horas se viralizó en Twitter una fotografía en la que se ve a Karen Abudinen, actual ministra de las Tecnologías de la Información y Comunicaciones (TIC), junto a José Guillermo Hernández, o mejor conocido como ‘Ñeñe’ Hernández, un reconocido ganadero del norte de Colombia, miembro de la alta sociedad de Valledupar y casado con María Mónica Urbina, exreina de nacional de la belleza, quien fue asesinado en Brasil en 2019.
La imagen se suma a la polémica en la que ya está envuelta la ministra Abudinen por los 70 mil millones de pesos embolatados por un contrato suscrito entre MinTIC y la la Unión Temporal Centros Poblados.
Según varios periodistas, la fotografía era un montaje, así lo dijeron en Twitter Paola Herrera y Mauricio Jaramillo. Sin embargo, la plataforma Colombia Check verificó que la imagen es real y fue tomada del perfil de Instagram de la exmodelo María Mónica Urbina.
“Le pedimos a tres familiares y amigos de integrantes de nuestro equipo que seguían en Instagram a María Mónica Urbina, la esposa de Hernández, revisar su perfil en esta red social, pues ella lo tiene configurado como privado”, reveló la plataforma.
La fotografía la subió Urbina el 8 de agosto de 2018 con un mensaje que dice: “qué bien la pasamos”. Se trata de la fiesta que el presidente Iván Duque ofreció, el mismo día 6 de agosto de 2018, “a sus amigos más cercanos y a los principales financistas de su campaña”, según un artículo de La Nueva Prensa.
En la reunión, que se llevó a cabo en el restaurante Andrés Carne de Res, en Bogotá, estuvieron también José Félix Lafaurie, Alan García, expresidente de Perú y Fernán Martínez.
La mayoría del país se enteró de quién era el ‘Ñeñe’ Hernández el día de su muerte, el 2 de mayo de 2019, en circunstancias bastante extrañas. Lo que trascendió entonces fue que el ‘Ñeñe’ salía de una feria que se llevaba a cabo en Uberaba, un pueblo al interior de Brasil, al tomar un taxi intentaron, aparentemente, robarle su reloj Rólex de oro, valuado en varios millones de pesos. En el forcejeo los asaltantes le propinaron tres disparos en el abdomen y terminaron con su vida.
Las condolencias de políticos y artistas no se hicieron esperar pero una en especial llamó la atención, la del expresidente Álvaro Uribe Vélez, jefe máximo del Centro Democrático, partido del presidente Iván Duque.
“Causa mucho dolor el asesinato de José Guillermo Hernández, finquero del Cesar, asesinado en un atraco en el Brasil donde asistía a una feria ganadera”, dijo entonces Uribe.
Así se hizo público que desde 2015 el ‘Ñeñe’ Hernández tenía una investigación cursando en su contra por el asesinato, el 18 de agosto de 2011, de Óscar Rodríguez Pomar, hijo del dueño de Sastrería GQ en Barranquilla, Carlos Rodríguez Gómez, quien además era un reconocido prestamista de dinero. Con él, el Ñeñe tenía una deuda que superaba los $1.000 millones de pesos (USD 246.540).
Además, tan solo un mes después de su muerte, su nombre terminó asociado a uno de los más peligrosos criminales de la costa norte del país, Marcos de Jesús “Marquitos” Figueroa, un contrabandista de gasolina y narcotraficante que llegó a tener tanto poder en Cesar y La Guajira (departamentos ubicados en el norte de Colombia) que incluso en la época de auge paramilitar en la región los hombres de Jorge 40 -jefe paramilitar del Bloque Norte de las Autodefensas Unidas de Colombia- no lograron doblegar a su banda de sicarios.
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