En un informe conjunto elaborado entre el Observatorio Laboral de la Universidad del Rosario y la Alianza EFI, titulado “Empleabilidad Juvenil en la Reactivación Económica en Colombia”, se analizó la situación de empleabilidad de los jóvenes en Colombia tanto como la vulnerabilidad de éstos ante un panorama de incertidumbre compuesto por la crisis económica y sanitaria que afronta el país desde hace 16 meses.
De acuerdo con el investigador Iván Daniel Jaramillo Jassir son dos las causas fundamentales que enmarcan la conclusión de dicho estudio:
- La primera tiene que ver con las barreras erigidas por la falta de experiencia y la desconexión entre los sistemas educativos y el mundo laboral; estos dos elementos en conjunto determinan las desventajas que los jóvenes enfrentan para acceder a su primer empleo;
- La segunda está fundamentada en la estabilidad en el empleo: la antigüedad laboral y la retención del personal experimentado deja a los jóvenes en una situación de desventaja ante las rotaciones de personal en las empresas.
A lo anterior, debe agregarse una tercera causa relacionada con “la interrupción en el seguimiento de los ciclos de formación en el contexto del Covid-19 que profundiza las barreras vinculadas a la disfuncional de la conexión de los sistemas de formación y el mundo laboral”, de acuerdo con Jaramillo Jassir.
Una de las recomendaciones del informe es tratar el problema de la empleabilidad juvenil desde un enfoque que atienda las variantes que presenta dicho sector poblacional, que no sea una solución genérica.
En palabras de otro de los investigadores relacionados con el documento, Andrés García Suaza: “la heterogeneidad del grupo poblacional de los jóvenes demanda estrategias diferenciadas para la corrección y eliminación de barreras por medio de políticas activas de empleo, enfocadas en las características de cada subgrupo: Ninis, jóvenes sobre calificados, sector rural, etc”.
Suaza se refirió a la reciente convocatoria del MinTrabajo que otorgará subsidios a las empresas que hayan contratado jóvenes a partir de abril de 2021. Destacó que dicho incentivo debe tener en cuenta los distintos sectores poblacionales que componen a la juventud del país para que el esfuerzo fiscal del Gobierno sea más equitativo:
Más allá de las limitaciones temporales de la Estrategia Sacúdete de subsidio a la nómina por contratación de jóvenes, resulta deseable incluir condiciones sociales, tales como garantías de estabilidad respecto de las vinculaciones, porcentajes por contratación de poblaciones jóvenes vulnerables, por ejemplo, mujeres, personas con discapacidad, entre otros, para la rentabilización social del esfuerzo fiscal
Las observaciones del informe coincidieron con la presentación que realizó el Departamento Administrativo Nacional de Estadística (DANE) que sostuvo que la tasa de desempleo juvenil para junio de 2021 alcanzó el 23,3%, superando la tasa nacional que se ubicó en el 14,4% para el mismo período de 2020.
La autoridad estadística informó que, en el caso de las mujeres, el indicador se ubicó en 29,9 %, con lo que disminuyó 6,6 puntos porcentuales frente al trimestre abril - junio 2020 (36,5 %), mientras que la tasa de desempleo de los hombres fue 18,5 %, por lo que se redujo en 5,9 puntos porcentuales respecto al mismo periodo del año anterior, cuando estuvo en 24,5 %.
El Dane destacó también que en el trimestre de referencia la tasa de ocupación de los hombres, de 50,6 %, fue mayor en 18,2 puntos porcentuales que la de las mujeres, que se ubicó en 32,4 %. Igualmente, al comparar esta brecha con el trimestre abril - junio de 2020 esta diferencia aumentó 2,0 puntos porcentuales.
Los anteriores datos enmarcaron el comportamiento negativo que tiene el empleo para jóvenes en Colombia en 2021: un 22% de la población total del país, entre los 14 a los 28 años, que sufre las consecuencias de una prolongada crisis económica.
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