El pasado lunes, 9 de agosto, se presentó un hurto en Cedritos, localidad de Usaquén, que terminó en una fuerte balacera entre los ladrones y los guardias de seguridad. En el popular restaurante ‘El Kiosko’, ubicado en carrera 12 con calle 145, un hombre habría sido perseguido por los delincuentes para despojarlo de una suma de dinero que ronda los 80 millones de pesos.
De acuerdo con el reporte de Semana, todo parece haber sido un seguimiento a un cliente en específico, el cual fue despojado de la millonaria suma y de más pertenencias personales.
En primer lugar, de acuerdo con testigos consultados por Blu Radio, cuatro hombres fuertemente armados entraron al local comercial de dos pisos. Después, procedieron a amordazar y amenazar a ocho trabajadores que se encontraban laborando a esa hora.
En ese momento, fueron por el sujeto que, presuntamente, se encontraban siguiendo. Según la Policía Metropolitana de Bogotá, un hombre de 42 años fue abordado por los sujetos con sus armas de fuego y fue despojado de sus pertenencias.
Asimismo, los delincuentes habrían hurtado las pertenencias de otros comensales y colaboradores. Fue ahí que los delincuentes subieron hasta el segundo piso del establecimiento, las oficinas administrativas, donde encontraron a un funcionario contando dinero.
Al ver la escena, los ladrones lo golpearon en la cabeza y lo amenazaron para obtener el dinero. “Me amenazaron y forcejeamos porque yo intentaba dejar el arma lejos del ángulo del tiro, ellos se fueron después y mis ayudantes trataron de detenerlos”, expresó el sujeto a Blu Radio.
En la persecución, relató, los ladrones dispararon contra los trabajadores en cerca de cinco ocasiones. “Estamos vivos de milagro”, expresó el administrativo a la emisora.
Según las autoridades, los cuatro hombres decidieron emprender la huida en un automóvil de color rojo, para el cual aún no se conocen las placas. Fue ahí que un vigilante del sector, quien presenció los hechos, intentó detener a los delincuentes accionando su arma de fuego en varias ocasiones. Sin embargo, esta acción no tuvo éxito para detener a los delincuentes.
Posteriormente, las autoridades iniciaron un llamado ‘Plan Candado’ para evitar la fuga de los hombres del perímetro. A pesar de los esfuerzos, hasta el momento, no se ha notificado sobre capturas referentes a los hechos. Para dar con los delincuentes, la Policía Metropolitana de Bogotá opta por revisar el registro de cámaras de seguridad del sector para identificar el vehículo y ocupantes del mismo.
Afortunadamente, según los reportes de las autoridades, no se registraron personas heridas después de las detonaciones, las cuales se accionaron en un sector aledaño a un parque infantil y familiar.
A pesar de que todos salieron ilesos, los testigos vivieron breves momentos de angustia y miedo por el repentino ataque de los delincuentes. “Muchas personas empezaron a gritar, se armó una balacera y esto generó pánico en el lugar, la situación fue difícil porque cerca hay un parque, había niños jugando y todo fue confusión en el lugar”, expresó Horacio Bustamante, habitante del sector, a La FM.
De acuerdo con el administrativo, no es la primera vez que se viven momentos de frustración y medio por robos en el local y en lugares aledaños. “La primera vez se metieron y se robaron más de 20 millones, se metieron en la noche y ya sabían dónde estaba la plata, la segunda vez se metieron a la casa de mis padres que queda al lado del Kiosko”, indicó.
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