Policía golpeada en Medellín: quién es y cómo descubrieron al hombre que le dio una patada a la agente durante una manifestación

El video del ataque a la patrullera de la Policía Nacional, Astrid Salas, se convirtió en una de las imágenes más destacadas del día de protestas de las jornadas del pasado 20 de julio. En Medellín, en el sector del Plaza Mayor, la mujer recibió una patada por la espalda que la derrumbó inmediatamente. El hombre que la golpeó, y quien cubría su rostro para evitar ser identificado, se escapó luego de golpearla y se escabulló entre la multitud manifestante. El hombre, sin embargo, fue capturado y puesto bajo disposición de la justicia colombiana el pasado domingo. La ropa que portaba ese día fue la clave.

En su residencia, en el barrio ‘Mesa’ del municipio de Bello, en el norte del valle de Aburrá, y luego de 18 días de indagaciones en su contra, la autoridad logró detenerlo. Cristian Camilo Toro Correa, nombre del señalado agresor, tiene 22 años de edad. El 20 de julio, las prendas que portaba Toro Correa lo delataron. Inicialmente, ese día, se le impuso un comparendo por porte de arma blanca, mientras se encontraba en inmediaciones de un CAI del mismo municipio, y tras una requisa. Tiempo después, el hombre agredió a la patrullera, y uniformados de la policía lo recordaron por el procedimiento que había ejecutado sobre él, horas antes.

“El hombre duró con la misma ropa todo el día, desde que se le hizo el comparendo en horas de la mañana hasta después que cometió los hechos. Conservó todo el día su vestimenta, lo que nos facilitó bastante la identificación, judicialización y captura”, detalló el brigadier general Javier Martín Gámez, comandante de la Policía Metropolitana, en testimonios recopilados por el periódico El Tiempo.

La uniformada, víctima del ataque de Toro, ya está fuera de peligro respecto a su salud, sin embargo, el golpe le generó una contusión a nivel lumbar, razón por la que fue traslada a la clínica de la Policía en Envigado. Allí, la mujer fue hospitalizada mientras los especialistas evaluaban el estado de su espalda.

“Considero que fue cobarde y más contra una mujer, considero esto que me sucedió como violencia de género. Nosotros también somos ciudadanos, también somos personas, sentimos, amamos, tenemos familia que nos espera”, dijo la mujer en una entrevista con Noticias RCN.

Salas no pertenece al ESMAD, por el contrario, integra la fuerza disponible de los dispositivos móviles de intervención, sin embargo, ese 20 de julio estaba cumpliendo funciones de apoyo.

“Ya está recuperadita hoy día, muy contenta porque se capturó a su agresor, a esa persona que sin misericordia ni nada la ataca de esa manera. Fácilmente le pudo haber costado la vida”, afirmó el comandante de la Policía Metropolitana.

La investigación contó, de acuerdo con lo que explicó el uniformado, con un cotejo morfológico y tres reconocimientos fotográficos. Esto permitió cruzar imágenes del victimario y obtener un 100 por ciento de compatibilidad. “Algunos seguimientos nos llevan a la residencia del individuo. El trabajo de policía judicial nos lleva a identificarlo de varias maneras”, comentó respecto al hombre por el cual se estaban ofreciendo hasta 10 millones de pesos de recompensa por información valiosa que permitiera la individualización, judicialización y captura.

“Iba caminado cuando sentí el impacto, caí al suelo y no recuerdo más (...) En el momento me encuentro hospitalizada aún en la Clínica de Envigado de la Policía Nacional, presento un pequeño trauma cervical, traumas en tejidos blandos y mucho dolor en cuello, columna, hombros y mentón”, detalló la mujer en una entrevista con El Heraldo.

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