Cacería ilegal: encontraron cabezas y otras partes de animales en una casa del Tolima

Una sorpresa fue la que se llevaron las autoridades en una casa de la vereda La Lajosa, zona rural del municipio de Falan, Tolima: encontraron cabezas, pieles, caparazones y demás extremidades de cinco especies de fauna silvestre que eran utilizados como adornos.

La Policía Ambiental y la Corporación Autónoma Regional de Tolima (Cortolima) inspeccionaron la vivienda y lograron incautar tres cabezas y cuatro extremidades inferiores de venado, piel de tigrillo, piel de perro de monte, dos pieles de babilla y cuadro pieles de armadillo.

Los caparazones de los armadillos, y las pieles de babillas y tigrillos formaban parte de la decoración de lugar, colgados en paredes o algunas columnas; las cabezas de venados, por ejemplo, se empleaban para colgar la ropa y los sombreros; y otros pellejos fueron encontrados en el piso de una gran sala.

Tras estos hallazgos, Indira Vallejo, bióloga de Cortolima, precisó que se hizo una visita en la zona, pero no se presentaron capturas, pues en este tipo de delitos, los actos deben darse en flagrancia.

El mayor Ómar Mosquera, jefe de Policía Ambiental en Tolima, aseguró que inició un proceso de investigación con el fin de verificar si dicha familia viene cometiendo el delito de caza ilegal. Además, los implicados manifestaron que ellos les compraron estas extremidades a un vendedor.

“Muchos animales son asesinados por inescrupulosos que explotan sus pieles con fines comerciales y en estos temas es fundamental la colaboración de los ciudadanos a través de las denuncias ante Cortolima y la Policía en cada municipio”, apuntó el funcionario ambiental.

Antecedentes de una denuncia:

De acuerdo con la información de Cortolima, hace dos meses se interpuso una denuncia por la presencia de un presunto cazador ilegal en la zona: “En el mes de junio, en la Dirección Territorial Norte, radicaron una denuncia sobre un presunto infractor en temas relacionados con caería de fauna silvestre. Debido a que estos temas los manejan en la sede principal de Cortolima, fue trasladado para su proceso de control y vigilancia con los profesionales de fauna”.

Sin embargo, tras las respectivos procedimientos, el pasado 6 de agosto, el organismo no pudo definir si la persona cometió un delito: “No logramos comprobar que la persona, en efecto, está cazando porque ese tipo de delitos se deben comprobar en flagrancia, pero sí logramos evidenciar que el infractor tenía productos y subproductos de fauna silvestre como pieles, casos de extremidades, cabezas y diferentes caparazones”.

LO QUE DICE LA LEY:

Estas acciones están contempladas en los delitos contra los recursos naturales y el medio ambiente (Ley 2111 de 2021), que fue sancionada por el Gobierno Nacional el pasado 29 de julio. Allí se contemplan multas desde 33 a 937 salarios mínimos mensuales legales vigentes (SMMLV) y de 16 a 54 meses de prisión preventiva por “caza ilegal”, dispuesto en el artículo 328B: “El que sin permiso de autoridad competente o con incumplimiento de la normatividad existente, cazare, excediere el número de piezas permitidas o cazare en épocas de vedas”.

Cabe recordar también que, en el 2019, la Corte Constitucional emitió un fallo que prohibió la caza deportiva en Colombia, al considerarla una práctica contraria a la protección de los animales: “El sacrificio de la vida de un ser vivo por el hombre es una forma extrema de maltrato en cuanto elimina su existencia misma y es un acto de aniquilamiento. Cuando es injustificada, la muerte de un animal es un acto de crueldad pues supone entender que el animal es exclusivamente un recurso disponible para el ser humano”.

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