En Bogotá, se avaluaron las condiciones en las que volverán a clases presenciales cientos de alumnos de colegios distritales del país, la Contraloría de Bogotá confirmó que realizó un inventario de cómo se encuentra la infraestructura educativa de 358 planteles oficiales de la ciudad (98% de las instituciones), con el propósito de evaluar su adecuación física para cumplir con las medidas bioseguridad establecidas por las autoridades sanitarias.
El ente de control visitó, entre el 23 y el 29 de julio, colegios distritales de las 20 localidades de la capital. El contralor de Bogotá, Andrés Castro Franco, entregó este miércoles los resultados de dicha verificación a la Secretaria de Educación, Edna Bonilla, quien anunció un plan de choque para garantizar el retorno seguro y evitar la deserción escolar en la capital.
Durante la inspección encontró que el 95% de los planteles tiene definidos y debidamente señalizados los espacios con el aforo máximo permitido y cuenta con la adecuada señalética sobre lavado de manos, distanciamiento físico, uso del tapabocas y necesidad de espacios ventilados.
Así mismo, la Contraloría Distrital pudo verificar que el 94% de los colegios visitados diseñó protocolos para la atención del covid-19, el 92% está promoviendo la vacunación entre la comunidad educativa, el 84% tiene formulada e implementada una estrategia para la alternancia de los estudiantes y el 81% realizó adecuaciones físicas a fin de dar cumplimiento a las medidas establecidas por el Ministerio de Salud y Protección Social respecto a las condiciones de bioseguridad para el uso de baños.
También se encontró que el 78% de los planteles realizó adecuaciones para asegurar el distanciamiento entre pupitres y cumplir con la adecuada ventilación en espacios cerrados y el 70% conformó grupos de seguimiento epidemiológico a los estudiantes a través de asignación o redes por curso.
También se evidenció que el 65% de los colegios distritales cuenta con la infraestructura suficiente para atender adecuadamente a todos los estudiantes en su retorno a clases presenciales.
“Es imprescindible brindarles a nuestros niños y jóvenes las condiciones para un retorno seguro, pues ello hace parte de la cadena de reactivación económica de la ciudad; resaltamos la inversión de recursos que ha hecho la Secretaría de Educación para disminuir el riesgo de contagios en los colegios”, afirmó el Contralor de Bogotá, Andrés Castro Franco.
Al comparar la infraestructura educativa por localidades, el ente de control halló diferencias en su adecuación: mientras los colegios oficiales de Usme y Engativá tienen formulada e implementada una estrategia para el retorno bioseguro en un porcentaje mayor al 90%, las instituciones de San Cristóbal, Kennedy y Ciudad Bolívar llegan al 82%, 69% y 65%, respectivamente.
La localidad de Ciudad Bolívar, por su parte, agrupa el 11% de la infraestructura educativa y el 40% de sus colegios tiene la capacidad para atender, de forma biosegura, a todos sus estudiantes. De otro lado, el 66% de los colegios de Usme tiene capacidad para recibir al 100% de los estudiantes y el 98% de sus colegios ya tiene implementada y formulada una estrategia para la alternancia educativa.
En cuanto a la localidad de Teusaquillo: aunque cuenta con solo dos colegios, estos tienen la capacidad de albergar a todos sus estudiantes y están totalmente preparados para ejecutar su programa de reapertura gradual y segura.
Las localidades de Engativá, San Cristóbal, Ciudad Bolívar, Kennedy y Usme concentran el 53,4% de la infraestructura escolar de la ciudad.
Según información oficial, en la implementación de protocolos de bioseguridad se han invertido más de 62 mil millones de pesos.
El jefe del ente de control destacó las inversiones que se han hecho en la adecuación de los planteles educativos para el regreso bioseguro de los estudiantes e invitó a continuar garantizando las condiciones necesarias para el desarrollo presencial de clases, dado que la pandemia no solo agudizó las brechas educativas sino que afectó la calidad del aprendizaje, la salud emocional y el desarrollo físico y social de los estudiantes.
Seguir leyendo: