El Makuhari Messe Hall se convertirá en el escenario en el que los colombianos Jefferson Ochoa, de Casanare, y Andrea Ramírez, de Boyacá, buscarán volver a traer al país una medalla olímpica salida de la categoría del Taekwondo, deporte que ya le había significado la gloria a los deportistas nacionales de manos de la presea de bronce alcanzada en Londres 2012 por Oscar Muñoz.
Ramírez, de 22 años, y Ochoa, de 24, se presentarán en las rondas de octavos, cuartos y semifinal en las categorías de los 49 y los 58 kilogramos, respectivamente, y aseguran estar completamente listos para lo que les depare la competencia. De quedar eliminados en estas, volverán a hacer lo propio durante una ronda de repesca que precede a las finales.
“Estamos muy bien preparados, porque el trabajo que se hizo fue de un año y medio, el cual nos sirvió muchísimo para los dos deportistas que estamos aquí. Jefferson y yo somos personas muy jóvenes y yo creo que la preparación nos sirvió para que podamos estar en las ilusiones y pensando en un pódium en estos Olímpicos”, declaró la deportista boyacense en un video difundido por el Comité Olímpico Colombiano.
Valga señalar que, la joven se inició en el deporte de origen coreano a los 13 años de edad, cuando un amigo de la familia las llevó a ella y sus hermanas a un evento de exhibición en su natal Sogamoso. Desde entonces, se ha llevado títulos como el bronce en el Mundial de Corea de 2017, tres oros en las Copas Mundo Presidente de Europa, África y América, una plata en los Juegos Bolivarianos de Santa Marta y un bronce en los Panamericanos de Lima.
Por su parte Ochoa, quien comenzó a practicar el deporte a los 11 años, manifestó en un material similar que, pese a su juventud, el taekwondo colombiano tiene posibilidades de lograr preseas en Tokio: “aquí solamente están los 16 mejores del mundo y nosotros estamos entre ellos. Sabemos que tenemos las cualidades para poder estar en el podio olímpico y vamos a luchar hasta el último segundo para poder ganar y llevarnos la victoria a casa”.
La pandemia afectó el ciclo Olímpico de varios deportistas, sin embargo, Ramírez señala que la enfermedad en realidad les sirvió a los dos representantes de Colombia para afinar sus habilidades de cara a la cita olímpica. “Somos deportistas muy jóvenes. Tenemos nuestro centro de alto rendimiento especializado, entonces pudimos concentrarnos en este sitio, donde contamos con todas las instalaciones, entonces se utilizó con mucho beneficio en esta pandemia”, aseguró la peleadora.
Así las cosas, ya se sabe que en la primera ronda, Andrea, preclasificada en el puesto 11, enfrentará a la croata Kristina Tomic, preclasificada en la sexta posición. Combaten por un cupo a los cuartos de final. Por su parte, Jeffersson fue preclasificado en la posición número 14 dentro de un cuadro de 16 competidores y enfrentará al iraní Armin Hadipour, que se ubica en el tercer puesto de la preclasificación.
Sobre sus perspectivas, el joven de Casanare aseguró que, “vengo muy fuerte mentalmente. La mentalidad en estos eventos es muy importante primeramente. Creo que la gente conoce que soy muy efectivo a la parte de la cabeza, es una de mis grandes cualidades a la hora de la competencia”. Así lo señaló, a pesar de que en estos momentos se considera que el cuadro no le favoreció.
“El taekwondo es trabajo, disciplina y responsabilidad. Las medallas se logran en los entrenamientos, a los eventos hay que ir a recogerlas. No hay favoritos, cualquier cosa puede pasar, podemos ganarle al que sea y estamos enfocados en eso”, manifestó el joven de Maní, Casanare, que ya cuenta con una medalla de oro ganada en los Juegos Nacionales y una de plata obtenida en los Panamericanos de Cancún, México.
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