El estadio Atanasio Girardot en la capital de Antioquia, casa de Atlético Nacional y del Deportivo Independiente Medellín, quedó listo para ser sede de competencias internacionales futbolísticas tras las obras que le realizaron con miras a la Copa América, que finalmente no se realizó en Colombia a raíz de la complicada situación de orden público que sufrió el país al inicio de las protestas del paro nacional en contra del gobierno del presidente Iván Duque.
Según informaron en el Instituto de Deportes y Recreación de Medellín (Inder), en total se invirtieron 9.702 millones de pesos, que a cambio de este jueves equivale a 2′535.349 dólares, con el que se realizaron varias intervenciones en su estructura.
Entre ellas se destaca la ampliación de la silletería de los palcos que pasó de 73 a 137 puestos, también se llevó a cabo la repotenciación de su sistema de iluminación con tecnología led con 2.000 luces en horizontal y 1.500 en vertical.
También se incluyó el mantenimiento de las cabinas de transmisión deportiva y se mejoró con la conexión Wifi y Lan dentro del escenario deportivo.
En el Inder explicaron que las obras se tenían previstas para que el Atanasio estuviera listo para la Copa América, pero aunque el evento deportivo se canceló en el país, en esa entidad continuaron con las intervenciones.
En un artículo que publicaron en mayo en el portal de deportes Futbolred informaron que con esta remodelación se continuaría con la postulación de Medellín como sede para las finales de la Copa Libertadores y la Copa Suramericana de 2023.
“Estas obras nos permitirán tener un estadio más moderno y renovado, con obras de gran calidad. Permitiremos que el estadio Atanasio Girardot sea un referente internacional para albergar este tipo de eventos”, señaló en Futbolred Carlos Romero, director del Inder Medellín.
SEGUIR LEYENDO: