“Por nuestra juventud, todo”: Gustavo  Bolívar sobre la demanda de pérdida de investidura por apoyo a Primera Línea

El pasado 19 de julio, el Consejo de Estado admitió una demanda de pérdida de investidura —o muerte política— contra Gustavo Bolívar, radicada por el ciudadano Joan Sebastián Moreno. La razón: el senador ayudó con una colecta para dotar con elementos de protección, como guantes, gafas y cascos, a algunos grupos de Primera Línea en Bogotá durante el paro nacional, que se adelantó entre finales de abril y mediados de junio.

Quien radicó la demanda argumentó que Gustavo Bolívar, al apoyar la colecta par ayudar a la Primera Línea encabezada en redes sociales por el colectivo Fundación Manos Limpias, estaba incumpliendo el artículo 110 de la Constitución Política de Colombia: donar a partidos o movimientos políticos mientras ejerce una función pública.

En la demanda se lee: “El artículo 110 de la Carta Política prohíbe que cualquier miembro del Estado que ejerza función pública done a partidos, movimientos o candidatos. Especificados los ingredientes de la ecuación, esto es que el senador Bolívar Moreno indujo a otros a financiar el movimiento de la ‘Primera Línea’, queda claro que incurrió en la prohibición constitucional de que trata el artículo 110 de la Constitución”.

Lo que explicó Moreno Hernández en su demanda fue que la Primera Línea, al “ejercer defensa y oposición bajo un criterio genuino de transformación social, en el que no es posible ubicar una cabeza que los lidere”, es un movimiento social y político. De ahí, el presunto incumplimiento a la Constitución y la solicitud de pérdida de investidura.

Pues bien, este 20 de julio, fecha en que se conmemoran los 211 años del grito de independencia de Colombia, Gustavo Bolívar se manifestó sobre la demanda:

Bolívar, además, se presentó a la instalación del Congreso (evento que encabezó el presidente Iván Duque) usando unas gafas y un casco, como los grupos de la Primera Línea que se manifiestan en las calles. También posó junto con otros congresistas de la oposición con la bandera de Colombia al revés, hecho que fue criticado por la bancada del Centro Democrático.

“Arriba el rojo sangre derramada por los jóvenes que suplicaban al Estado una oportunidad y el Estado les Respondió con represión brutal. Por nuestros jóvenes, todo”, comentó sobre la manera de sujetar la bandera.

Para expertos en seguridad como Néstor Rosanía, los grupos de Primera Línea “no tienen lo que en términos de conflicto se llama comando, control y comunicación. Lo que se ve es un movimiento social, con una metodología en común y que en Bogotá se han estructurado como grupos y subgrupos, con agendas de negociación diferentes”, le dijo a El Espectador.

Entretanto, congresistas uribistas como Paloma Valencia creen que se trata de un grupo terrorista. Así lo dejó entrever en revista Semana: “Le quiero leer el artículo 345 del Código Penal, que creo que responde su pregunta: ‘Financiación del terrorismo y de grupos de delincuencia organizada y administración de recursos relacionados con actividades terroristas y de la delincuencia organizada. El que directa o indirectamente provea, recolecte, entregue, reciba, administre, aporte, custodie o guarde fondos, bienes o recursos, o realice cualquier otro acto que promueva, organice, apoye, mantenga, financie o sostenga económicamente a grupos de delincuencia organizada”.

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