Para el próximo martes 20 de julio se esperan nuevas manifestaciones masivas en Colombia y, a modo de precaución, algunos mandatarios locales han tomado decisiones para evitar desmanes durante la conmemoración del ‘Día de la Independencia’ del país. Ante la alerta de las autoridades de supuestas intervenciones por parte de grupos armados al margen de la ley dentro de las marchas, cada administración ha optado por implementar medidas en sus territorios para mantener, como lo han mencionado varios de ellos, la seguridad de los ciudadanos.
En Cundinamarca, el gobernador, Nicolás García, anunció cuatro medidas, a través del decreto 251 de 2021. Lo que quedó estipulado es que desde hoy, lunes 19 de julio, a las 6:00 de la tarde, hasta el miércoles 21 de julio, a las 5:00 de la mañana, habrá restricción de la movilidad de vehículos distribuidores o transportadores de gas propano por las vías del departamento, así como la restricción de la movilidad de vehículos de materiales de construcción y escombros. De igual forma, se determinó restringir la movilidad de motocicletas con parrillero y el consumo de bebidas embriagantes en establecimientos y espacios públicos.
Algo parecido sucedió en el Quindío cuando Jaime Andrés Pérez Cotrino, secretario del interior de ese departamento, informó que se restringirá la movilidad de forma parcial para los vehículos que entren y salgan. El decreto 00393 entró en vigencia este sábado 17 de julio, desde las 5:00 p.m, y va hasta el miércoles 21 de julio hasta la media noche. Sí podrán movilizarse turistas; brigadas médicas y automotores relacionados con situaciones de emergencia o transporte de suministros.
En Bogotá, específicamente, el ministro de Defensa, Diego Molano, indicó que se ha dispuesto de un acompañamiento adicional en la capital colombiana de 6.196 uniformados de la Policía Nacional, 2.784 del Ejército Nacional y 592 más para Sabana Norte. Habrá 17 puntos de control y vigilancia.
“Vamos a garantizar los derechos a la movilidad, al trabajo, a la sana convivencia, en especial del Distrito Capital, por lo tanto nuestra Policía tendrá todos los dispositivos necesarios para capturar y judicializar a aquellos responsables de actos que afecten TransMilenio, los bienes privados o los bienes públicos de la ciudad”, señaló Molano.
En Cali, más de 3.000 policías se desplegarán durante el 20 de julio, así lo recalcaron el alcalde Jorge Iván Ospina; el secretario de Seguridad, el coronel retirado, Carlos Soler, y el comandante de la Policía Metropolitana de la ciudad, brigadier general Juan Carlos León. Habrá controles para evitar el parrillero hombre en motocicletas y, según explicó la gobernadora del Valle del Cauca, Clara Luz Roldán, habrá toque de queda y ley seca, entre el 19 y el 21 de julio; aclaró que esta decisión no cobija ni a Cali ni a Buenaventura por ser distritos especiales y autónomos.
El toque de queda y la ley seca regirán a partir de las 7 de la noche del lunes 19 de julio a la 5 de la mañana del martes. Luego volverá a regir a las 7 de la noche de ese martes hasta las 5 de la mañana del miércoles.
Barranquilla, según el alcalde Jaime Pumarejo, el ministro de Defensa, Diego Molano, tendrá 300 unidades del Ejército que estarán en vigilancia. En Antioquia, explicó el gobernador encargado, Luis Fernando Suárez, ”se fortalecerán las capacidades en los puestos de mando unificado, tanto en el del Área Metropolitana, como en el del Departamento de Policía Antioquia, para que se puedan tomar las decisiones que sean necesarias”.
Daniel Quintero, alcalde de Medellín, aseguró que la capital antioqueña se encuentra en alerta por presuntos avisos de violencia y vandalismo impulsados por el ELN.
“Tenemos una amenaza cierta de inteligencia del frente urbano nacional del ELN que tendría intereses de actuar el día de mañana y por eso hacemos un llamado a la ciudadanía para que esté atenta para que nos dé información porque estos grupos criminales podrían actuar, ya sea dejando artefactos explosivos, haciendo voladura de torres o haciendo colocación de símbolos o banderas en el territorio”, reveló el mandatario que, para ello, con el apoyo de la Policía Metropolitana del Valle de Aburrá, dispondrá de 2.268 efectivos para garantizar la seguridad.
”Se dispuso a todos los grupos activos de forma permanente, a los bomberos, a la Secretaría de Salud con sus entidades, EPS y hospitales, al Dagrd y a todos los actores que vamos a estar pendientes para que todo salga bien y no haya ningún problema”, agregó.
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