Luego del asesinato del presidente de Haití Jovenel Moise, fueron detenidos unos 26 exmilitares colombianos por estar presuntamente implicados en el crimen, así lo informaron este viernes altos mandos del Ejército y la Policía en Bogotá. Además, otros dos señalados murieron. Mauricio Medina Romero, de 45 años era uno de ellos. Fue suboficial retirado del ejército y es acusado de estar relacionado con el magnicidio del mandatario haitiano Jovenel Moise.
De acuerdo con una entrevista que dio su esposa a Caracol Radio, Giovanna Romero, el hombre fue contratado para proteger la vida del mandatario.
“A él le hizo la invitación un compañero suboficial que lamentablemente también falleció, que fue Duberney Capador, que trabajó con él en una unidad cuando eran activos los dos”, dijo Romero.
La mujer, que tenís 20 años de matrimonio con Medina, y que tuvo la última comunicación con el hombre el pasado martes a través de WhatsApp, aseguró que no entiende porque el exmilitar esta relacionado con este crimen y enfatizó en que su esposo no era ningún mercenario, pues cuando se retiro del Ejército lo hizo de la mejor forma y sin ningún tipo de problema.
“Estuvo 21 años en servicio activo, se retiró en uso de buen retiro con los mejores estándares como empleado y funcionario, con una hoja de vida intachable”, anotó la esposa del acusado.
En cuanto a la forma como se enteraron de lo sucedido, lamentó que fue por medio de un video que se hizo público por redes sociales y que no haya sido de forma oficial. Pues la primera que lo vio fue una de sus hijas.
“Lastimosamente fue a mi hija Luisa Gabriel que le llegó un video donde se le veía el rostro a mi esposo y fue cuando nos enteramos, pero realmente de forma oficial no hemos sabido nada porque nadie se ha comunicado con nosotros”, contó Medina muy triste por su perdida.
Por ahora ella y su familia se encuentran a la espera de lo que les comunique la Cancillería sobre la repatriación pues no tiene claridad en el asunto.
“Ya la Cancillería se comunicó con nosotros, para diligenciar unos documentos y estamos a la espera de poder saber que sigue ahora, porque realmente no sabemos absolutamente nada”, señaló.
El sábado 10 de julio, la Cancillería Colombia público un mensaje refiriéndose a la repatriación y a que continuaran ayudando con la investigación de los hechos que calificaron como confusos.
“Reiteramos nuestra disposición para ayudar a esclarecer los hechos y ubicar a responsables de esta atrocidad. Trabajamos con las autoridades de Haití, para adelantar la repatriación de cadáveres de nuestros connacionales, quienes tienen derecho a una sepultura digna en su país”, escribió la entidad en un trino.
Para ello, y para atender las solicitudes de asistencia del resto de exmilitares que en este momento se encuentran capturados bajo sospecha de magnicidio, el Ministerio del Exterior buscará, a través de la Dirección de Asuntos Consulares, apoyarse en la Embajada de Colombia en República Dominicana y el cónsul honorario del país en Haití.
No sobra mencionar que en las últimas horas ha tomado fuerza la hipótesis que afirma que los 26 colombianos habrían sido engañados para viajar hasta el país insular. Eso gracias al testimonio de familiares, otros exmilitares que rechazaron la oferta y una serie de hechos e incongruencias que, como mínimo, levantan dudas alrededor de toda la situación.
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