Protección de humedales y siembra del mayor bosque urbano de América: así será el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial de Bogotá

De acuerdo con la alcaldesa Claudia López, la próxima semana entregará el POT al Consejo Territorial de Planeación Distrital y después al Concejo de Bogotá.

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Como resultado del trabajo articulado en mayo y junio de este año entre la Corporación Autónoma Regional (CAR) y la administración distrital, este viernes se materializó la concertación de temas ambientales del Plan de Ordenamiento Territorial (POT): ‘El renacer de Bogotá 2022-2035′, que desarrolla un enfoque ambiental y se realiza de manera colectiva con la ciudadanía.

El plan propone elevar los niveles de protección a diferentes componentes de la estructura ecológica principal, como por ejemplo los humedales, e igualmente incrementa su número de hectáreas y les da un mayor rango de protección; crea figuras concretas para poder proteger la zona de borde entre lo urbano y lo rural; y sobre todo, toma la decisión de sembrar el mayor bosque urbano de América: la Reserva Thomas van der Hammen.

“El POT del renacer de Bogotá honra y amplía la ruralidad, honra y amplía las áreas protegidas, fortalece y amplía la estructura ecológica principal. Aquí también honramos a nuestro país, a sus propósitos, que no solamente son trascendentes a los gobiernos, sino también a varias generaciones”, aseguró la alcaldesa mayor, Claudia López.

Así mismo, destacó López, continúa un esfuerzo de muchos años, orientado por la CAR, la Alcaldía Mayor, la nación, la Gobernación de Cundinamarca y el Tribunal Administrativo de Cundinamarca, de proteger el río Bogotá, columna vertebral de ordenamiento territorial.

Este es un POT verde, y yo si quiero agradecer en nombre de muchos niños que disfrutarán esta ciudad, de muchos jóvenes, de nosotros también, que disfrutaremos de ese inmenso pulmón que se le quiere dar al Distrito, y que sin lugar a dudas va acompañado y directamente proporcional a la sabana, a esa región metropolitana, dijo Luis Fernando Sanabria, director de la CAR.

Esta propuesta se entregará al Consejo Territorial de Planeación Distrital (CTPD), que dispone de 30 días para su análisis, continuando con el proceso de participación ciudadana y, posteriormente, se radicará ante el Concejo de Bogotá en agosto, cuando se debatirá el POT en un plazo de 90 días; para que la capital tenga un nuevo POT antes de fin de año.

“Este es un POT que reconoce y lleva al Concejo Distrital temas que requieren de una discusión amplia y democrática, y que buscan un equilibrio y un método de compensación por las afectaciones que pueden requerirse para que el desarrollo de la ciudad se armonice con la prioridad que tienen los temas ambientales”, dijo la secretaria de Ambiente, Carolina Urrutia.

Por su parte, la secretaria de Planeación, María Mercedes Jaramillo, manifestó que “este POT es un homenaje al hermoso paisaje bogotano y a esta sabana que es tan única, que es nuestra casa y que queremos más verde”.

Proceso de Concertación Ambiental

La firma del Acta de Concertación Ambiental se realiza después de ocho sesiones de trabajo realizadas con la CAR para los temas rurales y nueve jornadas con la Secretaría de Ambiente (SDA) para los aspectos urbanos-ambientales, además de las mesas técnicas efectuadas sobre asuntos específicos.

Con la Secretaría de Ambiente se discutió el contenido estratégico y las estructuras territoriales que componen este POT (Estructura Ecológica Principal –EEP-, estructura socioeconómica y cultural, estructura funcional y del cuidado y estructura integradora de patrimonios), con especial énfasis en la EEP y las áreas protegidas del orden distrital.

Igualmente, se revisaron temas de gestión de residuos, dimensión ambiental de las actuaciones estratégicas (intervenciones en grandes sectores urbanos), asuntos de ecourbanismo y construcción sostenible, entre otros.

Por otro lado, de acuerdo con la alcaldía, con la CAR se revisaron las escalas (regional, distrital: urbano y rural, y local), objetivos y estrategias del ordenamiento territorial, así como, de gestión del riesgo y el cambio climático, para fortalecer el enfoque regional. Igualmente, se reforzaron aspectos asociados a la EEP, en el marco de sus competencias y respecto a los usos del suelo rural.

Principales puntos ambientales concertados

Con cada una de las autoridades ambientales se concertaron asuntos fundamentales: por ejemplo, con la Secretaría de Ambiente se discutieron y acordaron los objetivos del ordenamiento territorial para reconocer todos los ecosistemas estratégicos del distrito y se consolidaron los paisajes bogotanos como la expresión de los distintos ecosistemas presentes en el territorio.

En la EEP se acordaron las condiciones para los usos y la delimitación de los elementos de competencia de esta entidad, se precisaron aspectos asociados con la definición del sistema hídrico y los límites físicos de las rondas hídricas.

En el componente urbano se incorporaron las Zonas Urbanas por un Mejor Aire (ZUMA), como estrategias de conectividad de la EEP, para definir acciones de mitigación de emisiones de contaminantes atmosféricos y reducir la vulnerabilidad de las personas frente a la mala calidad del aire.

Un POT construido con la ciudadanía

Como resultado de la concertación ambiental y gracias a los aportes de la ciudadanía, se logró definir las políticas, los principios, objetivos y escalas del ordenamiento territorial del distrito, así como la clasificación del suelo en: urbano, de expansión urbana y rural.

Además, se consolidaron aspectos ambientales fundamentales relacionados con el ordenamiento ambiental a partir del sistema hídrico, en torno a la recuperación del río Bogotá como eje fundamental de la articulación ambiental regional, y de la EEP como eje fundamental del ordenamiento territorial y de los paisajes bogotanos.

Otros de los aspectos se relacionan con la protección, restauración, recuperación, interacción, articulación y conectividad de los elementos y sistemas que componen la EEP, en sus escalas local, distrital y regional; la protección integral de la reserva Thomas van der Hammen; el mejoramiento de la calidad de vida de los bogotanos y los cundinamarqueses y la promoción del desarrollo de la ciudad de manera ambientalmente sostenible.

“Por mucho rigor técnico, por mucha buena intención y perspectiva plural y diversa que hemos tenido hasta ahora en este año y medio de trabajo para formular este Plan de Ordenamiento Territorial, por supuesto aún queda un amplio debate público, que seguramente lo nutrirá con nuevas visiones, con correcciones, con apuestas, y con aportes”, concluyó la alcaldesa mayor, Claudia López, al anunciar que la próxima semana entregará el POT al Consejo Territorial de Planeación Distrital y después al Concejo de Bogotá.

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