Policía entregó balance de las manifestaciones del 28 de junio: disturbios, uniformados heridos y buses quemados

Las autoridades se refirieron a varios de los hechos vandálicos que se presentaron este lunes, cuando se cumplieron 60 días de paro.

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En la imagen, Integrantes del
En la imagen, Integrantes del Escuadrón Móvil Antidisturbios (ESMAD) se enfrentan a en el sector de Usme, sur de Bogotá (Colombia). EFE/ Mauricio Dueñas Castañeda/Archivo

Este lunes 28 de junio se cumplieron dos meses de manifestaciones en Colombia y en su día 60 se presentaron diversas alteraciones del orden público, confrontaciones entre la población civil y la fuerza pública y varios hechos vandálicos en varias ciudades del país.

Por su parte, la Policía nacional dio un primer balance sobre la más reciente jornada de movilizaciones en el territorio colombiano, en el que reportaron vehículos de transporte públicos dañados, miembros de esa institución heridos y más.

“Tenemos un total de 22 buses afectados y 12 hombres lesionados de la Policía Nacional. Algunas estaciones y portales fueron atacados. No es ninguna protesta pacífica, es violenta”, indicó el general Óscar Gómez Heredia

BOGOTÁ

Aunque la alcaldesa de Bogotá, Claudia López, ordenó disipar las aglomeraciones en Suba y las Américas, este lunes se caracterizó por nuevos eventos multitudinarios en dichos sectores no solo en la capital sino en el resto del país.

“Doy la orden para que se suspenda toda aglomeración en los portales de Américas y Suba”, afirmó la mandataria y agregó que estos grupos de personas no pueden trasladarse ni a parques ni sitios aledaños.

Además, pese a que los bloqueos viales ya fueron levantados en su mayoría y las protestas se han convertido en plantones de personas en las zonas más significativas de la manifestación, este lunes 28 de junio se revivió el levantamiento social en varias zonas del país.

El sistema de TransMilenio presentó algunos bloqueos en el Portal 20 de Julio y en Usme, que se superaron horas después para dejar el sistema sin novedades, aunque se esperan manifestaciones en otras zonas de la ciudad, tanto por el Paro Nacional como por el día del Orgullo LGBTI.

Igualmente, la Policía Metropolitana de Bogotá reportó que seis buses del SITP, con pasajeros dentro, estuvieron secuestrados durante varios minutos, al parecer por manifestantes, en el barrio Yomasa, de la localidad de Usme, en el sur de la capital del país.

“En horas casi de la media noche, seis sujetos abordan un vehículo de transporte público del SITP en el barrio Lucero, este amenazando no solamente a los pasajeros sino al conductor, hace cambiar el rumbo de la ruta de este vehículo hacia la parte central de la ciudad”, señaló el teniente coronel Jeysson López, oficial se supervisión de la Policía Metropolitana de Bogotá.

De acuerdo con las autoridades, los delincuentes son extranjeros y uno de ellos colombiano, al parecer se ubicaron en un paradero cerca a la estación del Hospital de Meissen sobre la avenida Boyacá, a la entrada del barrio Lucero, de la localidad de Ciudad Bolívar para su plan criminal.

MEDELLÍN

En la capital antioqueña las manifestaciones presentaron los primeros altercados entre los ciudadanos y la fuerza pública. En inmediaciones de la sede de la Universidad Nacional de Antioquia y la Autopista Norte, la Policía y el Esmad habrían realizado una intervención que desencadenó en denuncias de agresiones contra la misión médica y defensores de derechos humanos.

Los miembros antimotines habrían dispersado un bloqueo en Punto Cero, a donde habrían llegado los manifestantes que realizan el campamento del Parque de la Resistencia o de los Deseos. Esta situación llevó a que la Estación Universidad del Metro se encuentre suspendida.

IBAGUÉ

En la capital tolimense, un grupo de vándalos intentó quemar la sede del Icetex, que está al centro de la ciudad, en cercanías a la Alcaldía de Ibagué. De acuerdo con testigos del suceso, se evidenció un incendio que “no pasó a mayores”. Sin embargo, también se reportaron arremetimientos con rocas hacia las instalaciones de la sede de prestamos educativos en los que se destruyeron computadores y diversos implementos del establecimiento.

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