Una clase de primaria de Santa Marta fue testigo de la acción criminal de un ladrón que ingresó a la vivienda de un menor, amenazó a sus cuidadores y se llevó el computador en el que se encontraba cumpliendo sus labores escolares.
El hecho sucedió en una vivienda de la urbanización Tayrona, donde aparentemente un hombre se identificó como un domiciliario, pero cuando los habitantes abrieron la puerta, irrumpió y los amenazó con un arma de fuego.
Según contó la propietaria de la vivienda y madre del menor al medio Santa Marta al Día, ella se encontraba en el almacén de su propiedad que está a pocos metros de la casa. La mujer que cuida a su hijo, pensó que el domiciliario era enviado por ella y decidió abrir la puerta.
Fue allí cuando sacó el arma y encañonó a la mujer para entrar a la vivienda. En su recorrido para despojar a las víctimas de todas las pertenencias, se encontró con un profesor que acompaña al menor y lo encañonó para obligarlo a subir a otro piso de la casa.
Esa acción sucedió justo detrás de un niño de 8 años de edad, quien se encontraba atendiendo su clase virtual ante las cámaras de sus compañeros y su profesora. El menor, al ver la situación, pretendió ayudar a su maestro en casa, pero su docente virtual lo detuvo. “Samuel, Samuel, quédate ahí...”, le dijo al darse cuenta de lo que estaba pasando.
El niño, evidentemente asustado, tomó de nuevo el asiento pero no dejaba de mirar hacia atrás esperando que el criminal lo agrediera a él. Cuando sucedió el temido momento, la maestra le dijo que se fuera para otro lugar de la vivienda y el ratero cerró el portátil para llevárselo.
La maestra, como se ve en las imágenes, solo pudo taparse la boca sorprendida y nerviosa por lo que pudiera sucederle a su estudiante, sin asustar a los demás, por los terribles hechos de los que acababan de ser testigos.
Según contó la madre del menor a Santa Marta al Día, el criminal subió al segundo piso de la casa, a donde obligó a las demás personas a seguirlo. Allí se encontró una caja fuerte y los intimidó para que le dieran la clave, pero ninguno la conocía.
De ese modo, decidió llevarse la caja fuerte, el computador del menor y otros objetos de valor que guardó en una caja que le servía para fingir la entrega de encomiendas.
Según la propietaria y víctima, el criminal salió caminando tranquilamente de su casa y no tenía transporte para la huida sino que se desplazó como un ciudadano más después de cometer el hurto.
Gracias a la grabación de la clase virtual, la madre del menor y víctima del hurto logró poner una denuncia para que el criminal sea identificado, un hombre de unos 35 años de edad, de piel morena, que el día del hurto vestía una chaqueta azul aparentemente de una empresa de mensajería y botas de cuero.
La mujer manifestó a varios medios locales que está cansada de la inseguridad de la ciudad, debido a que los ciudadanos no pueden estar tranquilos ni en sus propias casas, donde ahora los delincuentes ingresan y sin importar la presencia de menores de edad, cometen sus acciones criminales.
Hace pocos días la Policía de Santa Marta atendió voces de auxilio de una familia en el barrio Corea, donde había un hombre armado que pretendía llevarse todos los elementos de valor.
Los uniformados, en el momento en el que ingresaron a la casa, evitaron que el criminal agrediera a una menor de edad, y frustraron el hurto que pretendía realizar en la vivienda, por lo que los criminales han tomado esa modalidad de hurto donde las familias quedan a merced de los delincuentes.
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