Venezuela llama “emboscada fronteriza” la decisión de Colombia de abrir la frontera

La administración de Nicolás Maduro en Venezuela no aceptó la decisión unilateral de Colombia para abrir la frontera y calificó la acción como una “emboscada fronteriza” que no tendrá el apoyo de ese país para regular el paso migrante.

“La República Bolivariana de Venezuela rechaza la intempestiva decisión tomada por el gobierno de Colombia, al anunciar la reapertura unilateral de los pasos fronterizos con Venezuela, mediante una resolución que circuló en horas de la noche del 01 de junio, tras haber anunciado oficialmente 24 horas antes, el día 31 de mayo de 2021, la decisión de mantener el cierre de las fronteras hasta el mes de septiembre”, aseguró el canciller venezolano Jorge Arreaza por medio de un comunicado.

Según Arreaza, al ser una decisión unilateral la frontera no queda abierta e invitó a las autoridades colombianas a sostener conversaciones para una coordinación bilateral, en la que se acuerden las medidas de seguridad, comerciales y sanitarias que definan la reapertura de los pasos fronterizos.

“Esta suerte de emboscada fronteriza deja en evidencia que el gobierno colombiano sigue haciendo uso de tretas políticas con el fin de distraer la atención de la opinión pública ante los notorios hechos de violaciones continuadas de Derechos Humanos que desde hace 36 días han estremecido a la sociedad colombiana y al mundo entero. Hechos dolorosos ocurridos en torno a las protestas anti gubernamentales y a la inaudita respuesta represiva del Estado colombiano”, señaló Venezuela.

Maduro ha sido denunciado por opositores de ese país y miembros del Gobierno en Colombia, de supuestamente auspiciar las manifestaciones y bloqueos en el país. Aunque el jefe de Gobierno bolivariano ha enviado mensajes de apoyo al Paro Nacional, sus funcionarios rechazan las acusaciones.

“La República Bolivariana de Venezuela recuerda al gobierno colombiano la seriedad con la que deben abordarse los asuntos fronterizos, siempre en apego al Derecho Internacional y a la buena vecindad, al tiempo que ratifica que ninguna decisión desesperada y unilateral es efectiva, ni contribuye al bienestar de los pueblos venezolano y colombiano que hacen vida en las zonas fronterizas de ambos países”, puntualizó Arreaza en su comunicado.

Al parecer, ante la negativa de aceptar la apertura de la frontera, la Guardia Venezolana estaría impidiendo a los ciudadanos de ese país cruzar los puentes autorizados, a menos que se justifique una urgencia que debe ser atendida en Colombia o contar con un permiso especial.

Las relaciones diplomáticas entre Colombia y Venezuela se interrumpieron desde febrero de 2019, después de que el presidente Nicolás Maduro expulsara a diplomáticos colombianos de su país y ordenara el cierre de la frontera con Colombia.

“Esta es una ventana para que muchos ciudadanos venezolanos puedan solicitar el estatuto temporal de protección para migrantes -que les da garantías sociales y derechos- en Colombia si ingresan de forma regular”, explicó a la AP Ronal Rodríguez, investigador del Observatorio de Venezuela de la Universidad del Rosario. “En los últimos meses la dinámica de pasaportes en Venezuela ha mejorado poco a poco y habría una intencionalidad del régimen venezolano de empezar a reconstruir esa relación (con Colombia)”, agregó.

Afectados por la crisis económica provocada por la pandemia, los empresarios de las ciudades fronterizas reclaman la apertura total de la frontera con Venezuela para activar el comercio formal. La Cámara de Comercio de Cúcuta hizo el lunes una petición pública a los dos gobiernos por medio de un comunicado argumentando que una reapertura generaría “miles de puestos de trabajo directos e indirectos”.

La frontera entre los dos países tenía un alto flujo de viajeros antes de su cierre. En 2018 salieron de Colombia 164.555 nacionales hacia Venezuela y entraron 1,3 millones de venezolanos hacia Colombia, según cifras de la autoridad migratoria colombiana. Colombia es el país que más migrantes venezolanos alberga en su territorio, con un total de 1,7 millones.

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