La Universidad informó que inició una investigación por la denuncia anónima de un presunto caso de abuso sexual que se habría cometido en el campamento universitario, social, popular, comunitario y de carácter humanitario que se encuentra en la Facultad de Ciencias de la Salud.
Según una denuncia anónima compartida por la organización feminista y de defensa de los derechos humanos, Movimiento Insurrectas, los hechos sucedieron el pasado 17 de mayo, en el marco del Paro Nacional en ese campamento de la ciudad de Popayán.
La persona denunció a dos hombres, a quienes señaló como amigos y conocidos, de haber cometido abuso sexual en su contra. Según dijo, los tres se reunieron a las 10:00 pm. en la Facultad de Salud y decidieron comprar licor, aportaron una parte a un canelazo y se tomaron el resto mientras fumaban marihuana.
Sobre la una de la mañana, los dos agresores se fueron a dormir a su carpa y cuando la persona con la que estaba decidió descansar, la presunta víctima buscó a sus amigos para acostarse, debido a que no tenía otro lugar y ellos se habían ofrecido para prestarle el espacio.
La presunta víctima manifestó que no podría dormir por el efecto del alcohol y la marihuana y al cabo de un rato, los otros dos hombres le tocaron abusivamente las nalgas por un tiempo prolongado de tiempo.
La persona afectada dice textualmente: “quedé paralizado, esperando a que no continuara y pensando al mismo tiempo que no podía salir de la carpa porque no había otra para quedarme y ya todos dormían”, señala la denuncia.
Después, los dos hombres que son señalados como agresores por la presunta víctima, según el relato, iniciaron actividades sexuales mientras lo tocaban a él. Según señala el denunciante, correspondió un beso, pero después iniciaron actos que no consintió.
La persona afectada manifestó que los dos hombres lo habrían obligado a realizar felaciones y lo sostuvieron, con su capacidad física disminuida por las sustancias, para impedir que se volteara mientras cometían presunto acceso carnal violento sin protección.
La presunta víctima asegura que intentó manifestar su negativa a sostener relaciones sexuales, evitando que lo pusieran en posición boca abajo o cuando intentaron desnudarlo, pero fue sometido hasta que se consumó la agresión.
“Después de esto, los agresores siguen durmiendo, mientras la persona afectada manifiesta sentirse paralizado, impotente, en un estado mental desconocido para él hasta ese momento, Incapaz siquiera de subir su pantalón, sale con el pantalón abajo afuera de la carpa, va al baño para intentar limpiarse, y después de eso, no habiendo un lugar seguro al que regresar, se queda por un espacio de dos horas en el patio de la Facultad, hasta que despertaran sus amigos a eso de las 7 a.m”, dice la denuncia.
Según la víctima, otros amigos fueron testigos de las marcas que dejó en su cuerpo el sometimiento por fuerza de la presunta violación.
“La persona afectada manifiesta tener posteriormente a los hechos la sensación de abuso en su cuerpo, culpa, impotencia, rabia y depresión. Sentimientos todos que han propiciado la reaparición de ideas suicidas en la persona afectada, que tiene un historial clínico complejo de tres intentos de suicidio”, señaló el Movimiento Insurrectas.
Los hechos se habrían cometido en medio de un espacio destinado a los manifestantes que participan políticamente de las actividades del Paro Nacional en la ciudad de Popayán, departamento del Cauca.
La Universidad del Cauca emitió un comunicado público en el que manifestó que rechaza este tipo de actos. “Una vez conocido este hecho en las redes sociales, se activó la ruta de género que tiene la institución para brindar acompañamiento psicológico, personal y familiar, lo cual está en proceso”, señaló la institución.
Así mismo, la universidad indicó que “procederá a instaurar la respectiva denuncia penal ante las instancias correspondientes, en cumplimiento de su deber legal. Como universitarios rechazamos este tipo de actos que atentan contra la libertad, la integridad y formación sexual de las personas. Respetamos y acompañamos la decisión que tome la persona afectada, para seguir brindándole el apoyo que requiera”.