Las denuncias respecto a presuntos abusos perpetuados sobre la ciudadanía a manos de uniformados de la Policía Nacional se hacen cada vez más resonantes. Daniel Steven Sánchez, un menor de 16 años, se convirtió en una nueva víctima mortal de este tipo de actitudes por parte de la autoridad, según denuncia su familia. Además de ser detenido de manera arbitraria, relata la familia, Daniel habría sido asesinado luego de quedar encerrado en una sede de Dollarcity, ubicada en Siloé, en Cali, que se estaba incendiando. El relato de la familia, sin embargo, fue refutado por el de la Policía. De acuerdo con la institución, sus hombres no tendrían nada que ver con lo ocurrido en ese establecimiento comercial.
Los hechos ocurrieron el pasado 28 de mayo, cuando se conmemoraba un mes exacto del inicio del estallido social en Colombia. El joven, asegura la familia, se encontraba rumbo a casa luego de su jornada laboral, sin embargo, su recorrido se habría visto interrumpido por la presencia del ESMAD. Daniel, quien se encontraba con más personas, según el relato de sus familiares, quedó paralizado ante la presencia de los uniformados, lo que no le permitió correr de la mano de sus compañeros.
“Él alza las manos y trata de decirles que no tiene nada que ver. Ellos le dispara y él se tira al piso”, detalló su hermana, María Paula Sánchez en un video compartido en redes sociales. “El policía lo devuelve de una patada en la barriga y cae al piso”, agregó la mujer.
Del paradero del joven no se sabe nada minutos más tarde pues, contó María Paula, los uniformados suben a Daniel a una tanqueta y se lo llevan. Tras momentos de incertidumbre respecto al estado de salud del menor, quien fue detenido cerca del Dollarcity en el que se registró el incendio, se descubre que el menor se encontraba sin vida, dentro de ese establecimiento. El cuerpo de Daniel tenía graves quemaduras. “Ahí está la parte que no entendemos. ¿Por qué él terminó quemado en el Dollarcity? (...) En la forma en que mi hermano quedó, las quemaduras en el cuerpo, tiene que estar uno muerto para que algo te queme tan impresionantemente y vos no te movás. Él está demasiado golpeado en las fotos y videos”, explicó.
La Policía Nacional, ante las denuncias de la familia del joven, aseguró que ellos no tendrían nada que ver con la muerte del joven y que, por el contario, para el momento de los hechos, una tanqueta del ESMAD estaba ubicada en la estación de Lido, instalación de la autoridad que estaría en constante riesgo, según los uniformados, por la intención de algunos manifestantes de vandalizarla.
“Lo anterior, para indicar que las versiones preliminares, dicientes que la persona fallecida había sido llevada previamente por uniformados al interior del mencionado vehículo institucional, no es cierto teniendo en cuenta que el rodante no fue movilizado y por la circunstancia especial de violencia de la cual fue victimas dichas instalaciones no hubo atención al público”, argumento la entidad.
Daniel era el menor de cuatro hermanos, y según relato el diario El País, de Cali, el día de los hechos venía de hacer sus labores de construcción. “Él además le tenía miedo a las protestas, por su voluntad él nunca hubiera participado en esos disturbios”, comentó Angie, una amiga y vecina del joven.
Lo que sigue para la familia de Daniel Sánchez es esperar el dictamen oficial de Medicina Legal sobre el cuerpo del menor para confirmar o desmentir si el joven fue torturado antes de su fallecimiento, y las causas de su deceso.
Alejandro Palencia, realizador del reportaje en el que recogió los testimonios de la familia de Daniel, aseguró, en la noche del pasado martes, que a causa de amenazas en contra de su vida, la familia del menor tuvo que abandonar su casa en Siloé. En su cuenta de Twitter el joven manifestó, “responsabilizo al Estado de lo que le ocurra a cualquiera de ellos”.
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