Copa América 2020: cronología de un torneo fallido

A 11 días del partido inaugural, no se sabe dónde se disputará la Copa América. Así de increíble ha sido el derrotero de este campeonato fallido que parece nunca terminar de tomar forma definitiva.

La edición 47 del torneo internacional más antiguo del mundo ha sido también una de las más accidentadas desde su confirmación. Fueron casi dos años de idas y vueltas, de ratificaciones y rectificaciones, de confirmaciones y negativas. Y, a pesar de que todavía hay final abierto, esta es la cronología de la Copa América 2020/2021.

-En el Consejo de la FIFA de octubre de 2018 se llegó a un acuerdo para que la Copa América pasara a disputarse en los años pares, con el objetivo de que coincida en el calendario con la Euro.

-Con la edición 2019 ya confirmada en Brasil, se planteó la posibilidad de que en 2020 se volviera a jugar en Estados Unidos, tal como había ocurrido en 2016 con la Centenario. Sin embargo, Conmebol desestimó eso y eligió jugarla en Sudamérica.

-En marzo de 2019, se aceptó la inédita postulación conjunta de Argentina y Colombia. Jamás dos países habían organizado el torneo y menos aún los dos más distantes del continente. Se eligió para “unir” a toda la región, de norte a sur.

-En abril, Colombia decidió postularse en soledad, pero días después se aprobó la realización del campeonato en ambos países con un formato distinto y dos invitados de Asia: Australia y Qatar.

-En marzo de 2020, la pandemia del covid 19 llegó a Sudamérica y el 17 de ese mes, Conmebol decidió cancelar el torneo y postergarlo para 2021. Fue poco después de que UEFA hiciera lo mismo con la Euro.

-A finales de 2020 se habló de la posibilidad de jugar los partidos con un treinta por ciento de público en los estadios.

-En febrero de 2021, Australia y Qatar confirmaron que no participarían del torneo por “problemas de calendario”. Se decidió que se jugaría sin invitados.

-A comienzos de abril, la segunda ola de la pandemia comenzó a golpear con dureza a todo el continente, pero las autoridades colombianas y argentinas confirmaron que el evento seguía en pie, con protocolos y sin público.

-El 28 de abril comenzó una huelga nacional en Colombia que aún continúa. En las semanas siguientes, el gobierno ratificó una y otra vez la realización de la Copa, más allá de las protestas cada días más multitudinarias y violentas.

-El 21 de mayo, el gobierno de Colombia pidió a la Conmebol la postergación del certamen a fin de año para que se pueda jugar con público. La Confederación no aceptó la propuesta y la sede quedó solo en Argentina.

-El 26 de mayo, el jefe de gabinete de Argentina, Santiago Cafiero, afirmó que Argentina mantenía el compromiso de organizar su parte, más allá de que el país estaba en el peor momento de la pandemia.

-El 31 de mayo, tras días en los que se confirmó la disputa del campeonato varias veces, Conmebol informó que Argentina ya no sería la sede y que estaba en búsqueda de una nueva.

Gonzalo Belloso, secretario adjunto de la Conmebol, había anticipado en radio La Red que contemplaban como plan B la posibilidad de que Chile asumiera la organización de los cotejos que pertenecían a Colombia. Pero los hechos se precipitaron en las últimas horas, a pesar de que la entidad que rige el fútbol a nivel continental había evaluado varios estadios argentinos para sumar al menú, como los de Vélez y Estudiantes de La Plata.

Los rumores crecen mientras señalan a Estados Unidos como probable sede tanto por ser un país que ya superó el 50% de vacunados en su territorio, como por factores relacionados con el clima, la fuerte presencia sudamericana en Florida, y la infraestructura necesaria para hacer este evento.

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