Bucaramanga, capital de Santander y una de las ciudades más importantes del país, vive un tercer pico de la pandemia inclemente y que ya se ha extendido por más de un mes. Se conoció en las últimas horas que, con una ocupación de Unidades de Cuidado Intensivo cercana al 100%, se estaría aplicando el llamado ‘triage ético’ para las admisiones a las contadas camas de cuidado crítico.
“Las 73 camas UCI que tenemos están ocupadas. En este momento tengo dos pacientes intubados en urgencia y dos en piso, esperando UCI, pero no tengo. Las dos últimas semanas han sido bastante complicadas. Ya estamos utilizando el triage ético. Si se desocupa un cubículo y tengo a cuatro personas esperando, pues hago el triage entre ellos y escojo cual tiene mejor perspectiva”, le dijo a Vanguardia el director médico de la Clínica Chicamocha, Luis Francisco Silva.
Y la situación de angustia también la vive el personal de salud. Este jueves, se conoció un video del doctor, llamado Andrés Lloreda, quien rompe en llanto por la falta de cupos e insumos para atender pacientes críticos de covid-19. El hombre, según Blu Radio, trabaja en dos hospitales públicos de Bucaramanga.
“Hoy, es muy duro ver morir a nuestros sin ni siquiera poder hacer nada. Llegan en falla ventilatoria y con poco que hacer. Los hospitales colapsados. Es una situación que no entendemos sino nosotros, el personal de salud. Esta situación cada vez está peor, no hay oxígeno y la gente se está muriendo en los hospitales de primer nivel”, aseveró, entre lágrimas, el galeno.
Además, afirmó la dura situación que vive el personal médico y que el cansancio ya se acumula tras casi 15 meses de pandemia. “Nadie puede hacer nada. Es frustrante esto para uno como médico. Es muy frustrante. No sé cuando se vaya a acabar esto, pero realmente no damos más. No damos más ya”, añadió Lloreda al final del video.
El médico, quien ya había lanzado alertas por ocupación de UCI en pasados picos de la pandemia, se volvió viral en redes sociales por la impactante realidad que vive el personal médico en el país y el mundo.
El médico, afectado por el estrés y desconsuelo de ver pacientes fallecer, le dijo a Blu Radio que preferiría no trabajar en la profesión. “Estamos en una guerra sanitaria, pero es muy lamentable. Como funcionario de salud ver morir a la gente y escuchar la suplica de que no los dejemos morir es muy agotador. Estamos cansados, si me pusieran a elegir en barrer una calle o ejercer médico ahora mismo elegiría el primer oficio”, aseveró al medio radial.
Además, señala que las causas de la crisis hospitalaria son las marchas con aglomeraciones y una posible cepa nueva rondando por el territorio. “Desafortunadamente las marchas han hecho que el virus se propague sin piedad. La mayoría de la gente no usa medidas de bioseguridad como tapabocas y el virus que está circulando es mucho más letal, no tiene el mismo comportamiento de el del año pasado, debe haber una cepa”, indicó el galeno.
Lloreda finalizó recalcando que se está operando en los hospitales bajo un triage ético por falta de oxígeno y cupos. “Yo trabajo en el servicio de urgencias, nosotros estabilizamos el paciente, pero al ver que no tenemos, incluso, balas de oxígeno, debemos decidir a quién le damos la oportunidad. El personal del salud está reventado”, aseveró.
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