Este jueves 20 de mayo, Colombia solicitó a la Conmebol aplazar la Copa América para el mes de noviembre, torneo deportivo que tendría como sedes nuestro país y Argentina, teniendo en cuenta la situación actual del país por la pandemia y el desarrollo de las protestas del Paro nacional. sin embargo, una hora después de hacer esta solicitud, la Confederación negó la solicitud del Gobierno nacional y Colombia perdió la oportunidad de que los encuentros deportivos se realizarán en sus estadios.
En la mañana de este viernes, el ministro del Deporte, Ernesto Lucena habló en las emisoras Caracol y Blu Radio, donde detalló que para los funcionarios del Gobierno fue una sorpresa que la Conmebol respondiera tan rápido la solicitud que les hicieron y que decidiera que Colombia ya no sea la sede del torneo, puesto que consideraban que iba a ser una decisión que tomaría más tiempo.
A Caracol Radio el ministro explicó por qué el Gobierno solicitó un aplazamiento. “Hay varios factores. Veníamos trabajando hace más de año y medio con todos los protocolos de salud, porque el primer aplazamiento fue por la pandemia, eso lo teníamos casi resuelto, incluso ya se hablaba de un posible aforo del 25%, luego vinieron las manifestaciones sociales y ahí obviamente hubo un incremento y tomamos otras medidas”, señaló.
Agregó que el ministro de Salud, Fernando Ruiz, en una conversación que tuvieron este jueves les señaló que una cosa importante para la salud y la reactivación del país es que se pudiera tener un aforo de más de 50%, razón por la que decidieron hacer la propuesta a la Conmebol.
“Nos pareció que nos contestaron muy rápido, teníamos una esperanza, pero hoy por hoy Colombia no tiene Copa América y perdimos un eje de reactivación económica y un eje de reactivación social. Esto es parte de la dinámica actual y esperaremos cuándo se nos vuelve a dar una oportunidad”, dijo Lucena.
Detalló que esta sorpresa por la respuesta rápida correspondería a que hubo algunas presiones en la Confederación Sudamericana de Fútbol. “Hubo rumores de que hubo presión fuerte para que no se jugará la Copa América en Colombia. Detrás del fútbol también se mueve la política, no tenemos certezas, pero sí podemos decir que sí hubo presión, sí había intereses de que en Colombia no se jugara por parte de países del continente”, reveló.
Se refirió a las críticas por la solicitud que hicieron, pues a muchos expertos en los deportes les pareció absurdo que Colombia propusiera que la Copa América se hiciera en noviembre. “Nosotros teníamos en cuenta los calendarios, por supuesto, pero es que en esta pandemia a todos nos ha tocado buscar soluciones creativas”, señaló.
Por otro lado se refirió a la influencia de las protestas en esta situación, tanto en la decisión del Gobierno de posponer el torneo deportivo y la posterior respuesta de la Conmebol. “Aquí nadie está desconociendo los problemas sociales que tenemos, pero esto no puede ser indefinido, nosotros necesitamos reactivar la economía. La Copa América era un buen momento para trabajar todos en pro de la economía y de la salud”, señaló.
“Aquí se han abierto a todos los espacios a conversación. Eso fue lo que en muchos trending topics trataron de buscar: un impacto internacional fuerte. Pensábamos que para la fecha del evento obviamente íbamos a estar con unas conversaciones adelantadas, con unos pactos hechos, pero al parecer esas razones no fueron suficientes frente al tema de conflictividad social”, complementó en Blu Radio.
También se refirió a su posible salida de la cartera y señaló que, aunque tiene la disposición de seguir trabajando en el Ministerio del Deporte, por temas de salud lo haría, pero que por ahora continuará en el Ministerio hasta nueva orden. “Hace un año perdí absolutamente la audición del oído izquierdo, he hablado con el Presidente porque tengo la intención de hacerme una cirugía y él entiende mis razones, porque tengo que poner por encima mi salud. Esperaré en los próximos días los resultados de unos exámenes médicos para determinar mi situación”, señaló el ministro.
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