En 21 días de paro nacional, el gobierno de Iván Duque y el Comité del Paro se han reunido dos veces sin lograr avances en términos de negociación. Las conversaciones, lideradas por el Alto Comisionado para la Paz, Miguel Ceballos, y el minsitro de Trabajo, Ángel Custodio Cabrera, han transcurrido entre exigencias de los manifestantes y resistencia de los delegados del Ejecutivo.
El colectivo, liderado por estudiantes y sindicalistas, no cuenta con el apoyo de toda la manifestación. La misma, que no cesa las demostraciones públicas de descontento, es heterogénea y responde a más peticiones que las que se hacen públicas por medio de los comunicados oficiales del colectivo.
Por una poco fructífera reunión que pedía el cese a la hostilidad de la Fuerza Pública por parte del Gobierno y un rechazo explícito a los bloqueos por parte del comité, se volvió a terminar en ceros. Sin embargo, convocó a una nueva reunión entre los sectores que se realizará el próximo jueves 20 de mayo a las 7:00 a. m. en la sede principal de Compensar, en Bogotá.
A pesar de la falta de concertación, ya existe documento oficial de exigencias con 19 puntos que desglosan las peticiones del colectivo integrado por 26 sectores a nivel nacional.
Las exigencias
En primer lugar, el colectivo exige medidas inmediatas para que se de continuidad a la protesta social con garantías de no violencia para los manifestantes. De acuerdo con el documento, se exige el retiro del Ejército y el Esmad y, además, el cese de violencia de tipo sexual ejercida por los uniformados. Con respecto a la Policía Nacional, se solicita que se abstenga del uso de armas de fuego y de detener masivamente a manifestantes pacíficos.
Además, se solicita no tomar una decisión que declare estado de conmoción interior y que, con lo que este implica, pueda reprimir la protesta social pacífica por encima de las determinaciones constitucionales.
Frente al abuso policial, se exige que Diego Molano, ministro de Defensa, presente disculpas públicamente por los excesos de las instituciones a su mando. Incluso, piden que se retire del cargo a aquellos que han cometido excesos y que se abstengan de estigmatizar la protesta por medio de términos como “terrorismo vandálico”. En caso de ser víctima, se pide que haya un mecanismo de reparación.
En un segundo aparte, solicitan la presencia de actores internacionales como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos y de relatores especiales de Naciones Unidas para verificar las condiciones de protesta en el país. Segundo, se pide implementar un protocolo de garantía a la protesta a nivel regional y, frente a los hechos de violencia, piden una unidad especial de la Fiscalía para investigarlos en justicia ordinaria. A su vez, se pide acción de la Procuraduría y Defensoría del Pueblo. Por otro lado, frente a los desaparecidos, los manifestantes piden rendición de cuentas de la Comisión Nacional de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas.
En el tercer capítulo, el Comité del Paro hace énfasis en acatar la sentencia de la Corte Suprema de Justicia que evidencia los excesos de la fuerza pública. Además, con base a los Acuerdos de Paz, acordar una comisión de trabajo para acordar medidas que garanticen la protesta. Es aquí donde agregan la reforma a la Policía Nacional para que los excesos no sean permitidos y que algunas costumbres dañinas dentro de la institución sean replanteadas.
Frente a esto, Miguel Ceballos y compañía se comprometieron a estudiar el documento y, tal como se solicitó, la próxima reunión contará con la presencia del representante de Colombia ante la Organización de las Naciones Unidas, Carlos Ruiz, y monseñor Héctor Fabio Henao, delegado de la Iglesia católica, quienes se ofrecieron a acompañar el proceso como veedores neutrales.
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