Yina Calderón es una controvertida figura pública, entre otras razones, por el drástico cambio físico que ha logrado luego de practicarse un gran número de cirugías estéticas con las que modificó en su cuerpo algunos aspectos que no eran de su agrado, como sus glúteos, los cuales sufrieron bastante por los malos procedimientos quirúrgicos e indebidos cuidados posoperatorios.
Han pasado 7 meses desde que Yina Calderón se realizó la última cirugía de glúteos (por lo menos hasta ahora), como parte de un largo y tortuoso proceso médico que tuvo que llevar a cabo tras ser víctima de los biopolímeros.
En un principio, la también empresaria tuvo que someterse a la extracción del peligroso líquido y, no contenta con ello, se mandó a hacer implantes de silicona para poder tener las nalgas que siempre soñó. Sin embargo, en medio de la recuperación por esta nueva cirugía, Yina Calderón hizo caso omiso de las recomendaciones médicas e hizo esfuerzos y actividades que tenía prohibidas. Razón por la cual su cicatriz se abrió y tuvo que ingresar al quirófano de urgencia hacia mediados de octubre del 2020.
En aquel momento, su médico de cabecera dijo sentirse “triste y aburrido” por la falta de compromiso que mostraba ella con la recuperación. También advirtió que muy pocos cirujanos se atreverían a intervenir casos como estos, porque el fracaso es muy probable ante la dificultad.
“Las acciones irresponsables de Yina dan rabia y yo a ella le he hablado a las buenas, serio y la semana pasada sí le hablé muy fuerte porque es la vida de ella y nuestro trabajo, no es lindo ver que no valoran nuestro trabajo, ahora ella está convaleciente y parece que por fin se está cuidando”, comentó el médico Carlos Ramos, conocido como ‘el cirujano de las barbies’.
Ahora, luego de un tiempo prudente, la huilense decidió mostrar los resultados del trabajo hecho por los profesionales de la salud Carlos Ramos y Ricardo Urazán, por eso desde sus historias de Instagram compartió un par de videos en los que dejó ver que su proceso de cicatrización avanza satisfactoriamente.
“Muestre qué me quedó del tatuaje”, dijo Calderón a Andrés Arévalo (su novio) a través un clip en el cual aparece acostada moviendo las nalgas, y luego agregó: “ya lo tengo proporcional (el trasero). Y si notan, se me fue la mitad del tatuaje y ahí va la cicatriz”.
Posteriormente, Arévalo preguntó a todos los seguidores de Yina Calderón si les parecía un buen cambio –como él mismo lo admite– o, si por el contrario, sentían que se veía mejor antes. En la encuesta, la mayoría de usuarios le hizo saber a la pareja que esta nueva cirugía había sido una acertada decisión.
Yina Calderón también ha sido noticia en días recientes por cuenta de un video íntimo suyo que está circulando en Internet y sobre el cual se desató una discusión de grueso calibre porque hay quienes dicen que fue ella misma la encargada de filtrar el contenido.
En la grabación, hecha desde el edificio que está frente a su apartamento, se observa a la influenciadora mientras sostiene relaciones sexuales con su pareja en una habitación sin cortinas, con la luz encendida y la ventana del balcón abierta en su totalidad. Motivo por el cual se rumora que sería esta una estrategia de ‘cortina de humo’ para tapar y evadir la acusación del robo que por el cual la acusa Manuela Gómez.
El hecho en cuestión se trata de 13 muñecas que, según dice Gómez, le habría entregado a Yina como parte de pago por una promoción en redes para conseguir 100 mil seguidores, aunque esta no habría cumplido con lo pactado ni con la devolución de los elementos.
“No coman cuento. Hagan como yo, a un bagazo poco caso. Y solo les voy a decir una cosa, a mí no me gusta chicanear pero tengo una finca de $2.000 millones y creen que voy a deber unas muñecas”, comentó en días recientes sobre la polémica.
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